“No podemos permitir que nos pasen de héroes a villanos en cuestión de meses”, advierte el director del Foro
GIJÓN, 27 (EUROPA PRESS)
El director general del Foro Interalimentario, Víctor Yuste, ha sido claro este lunes en Gijón al indicar que el consumir debe pagar los costes de producción, más un margen “lógico y justo” de rentabilidad, de toda la cadena de producción agroalimentaria.
“El consumidor se debe acostumbrar a que los alimentos valen lo que valen”, ha insistido Yuste, quien ve “imposible” el topar el precio de los alimentos porque sería una “lacra” desde el punto de vista microeconómico y macroeconómico. Así lo ha señalado durante su intervención en la V Jornada del Sector Agroalimentaria en Asturias, organizada en Gijón por el diario El Comercio.
No ha sido la única advertencia que ha hecho Yuste, quien ha llegado a hablar de riesgos de soberanía alimentaria, si no se aplican medidas que permitan al sector seguir produciendo.
En esta línea, ha insistido en que si el consumidor no quiere quedarse sin abastecimiento, hay que cuidar a la cadena de valor del sector. “La seguridad alimentaria no se cuestiona, la calidad no se negocia”, ha remarcado.
Sobre el precio de los alimentos, con un IPC del 16,6 por ciento, el más alto en toda la serie histórica desde 1994, ha visto preciso aplicar medidas que reduzcan los costes de producción si se quiere rebajar este, pero también actuar sobre la carga fiscal. Cada eslabón de la cadena de valor repercute estas subidas de costes de producción, lo que eleva los precios al consumidor.
Yuste ha llamado la atención sobre que en los últimos tiempos estos costes se han ido incrementando debido a la guerra de Ucrania, la subida de los combustibles y suministros energéticos o de las materias primas, pero también el sector ha tenido que ir asumiendo cada vez más cargas fiscales y regulatorias.
Un ejemplo de esto último es el impuesto al plástico, siendo España el único país en aplicarlo de la UE, una vez que Italia decidió no llevarlo a efecto. También ha apostado por que se declare al sector especial y se considere dentro del sector electrointensivo.
DIQUE DE CONTENCIÓN
Con todo, ha asegurado que el sector ha sido un “dique de contención” de la subida de precios, pero ha agregado que llega un momento en que no se puede y hay que repercutir el incremento de los costes.
“No se puede pedir vender a pérdidas”, ha recalcado sobre ello. Incluso, ha alertado de la posible amenaza de que haya productos con costes menores en otros países que se importen. Eso sí, ha mostrado su esperanza de que eso no pase.
Por otro lado, ha incidido en que, en la normativa europea, parece que todo pasa por lo ‘verde’. Yuste, si bien ha estado de acuerdo en que es necesario cuidar el Planeta, ha insistido en que es preciso garantizar la rentabilidad. “No es momento de exigir más al sector”, ha dejado claro.
“La soberanía alimentaria no se garantiza sola”, ha recalcado, por otra parte. Es más, ha aludido al riesgo de poner no tenerla ante el aumento exponencial previsto de población a nivel mundial, que llevaría a tener que incrementar la producción de alimentos en más de un 50 por ciento. Algo que, según Yuste, pesa sobre el sector primario.
Este ha considerado, por ello, necesaria la innovación, la transformación digital y avanzar en eficiencia. Eso sí, ha remarcado que tiene un coste y una parte debe asumirla, a su juicio, la sociedad.
Vinculado a ello, ha visto en la Ley de la Cadena un avance, ya que significa no vender a pérdidas ninguno de los eslabones, aunque cree que a la normativa le falta “algo de engranaje”.
“No podemos permitir que nos pasen de héroes a villanos en cuestión de meses”, ha recalcado Yuste respecto al sector y la imagen que se le da por la subida de precios.
‘FAKE NEWS’
Por este motivo, ha animado a los 2,2 millones de trabajadores del sector a difundir entre sus amistades y familias datos positivos del mismo en aras a “seducir y fidelizar” al cliente, pero también ‘combatir’ las ‘fake news’, que según él se están “cebando” con el sector. “Aparte de ser falso, es injusto”, ha reprochado.
“El sector agroalimentario no es el problema, es la solución”, ha asegurado, antes de animar a “remar todos juntos” y garantizar el abastecimiento.
Otra seria advertencia que ha lanzado Yuste es sobre el clima y la sequía que se augura en España. Ha indicado, en este sentido, que se espera este verano una climatología “dura”, lo que incrementará los costes de producción augura.
Algo similar pasaría con los pastos, a lo que ha remarcado que si no llueve, hay más riesgos de incendios, y afectarían no solo a bosques, sino también a explotaciones agroganaderas.
Por otro lado, ha remarcado que la protección a la fauna debe ser compatible con las actividades agroganaderas, por lo que ha visto precisas medidas de protección.
En cuanto a los acuerdos comerciales con otros países como Chile, Australia o la India, ha reclamado que los mismos requisitos se deban cumplir en estos para producir que en España, porque, si no, no solo sería competencia desleal, sino que se perdería soberanía y autonomía agroalimentaria.
Otro riesgo al que se enfrentan los ganaderos, en este caso, es las enfermedades de los animales, como es la peste porcina africana, que ha esperado que no llegue a España.
Más allá de eso, ha dado la voz de alarma sobre la falta de relevo generacional, que ha considerado un reto “estratégico”. Yuste ha avanzado que puede haber problemas en diez años en la agricultura, la ganadería y la pesca. Sin productores españoles, se puede llegar a tener que depender de las exportaciones. A esto ha sumado la necesidad de una cadena logística “eficiente y segura”.
Asignatura pendiente es, además, el reducir los desperdicios alimentarios, con una cifra de 28 kilos al año de comida tirada por persona. “Es una lacra económica y una lacra moral”, ha opinado.
ALIMENTOS “FINITOS”
Y aunque se está reduciendo, ha señalado que es en los hogares donde más se desperdician alimentos. “Los alimentos son finitos, no se pueden despilfarrar”, ha recalcado Yuste, quien ha aludido a la Ley contra el desperdicio de la UE que seguramente entre en vigor en el segundo semestre del año. Eso sí, ha dicho esperar que no se cargue con ello más a la cadena de valor del sector.
Respecto a las oportunidades de negocio, ha indicado que el 80 por ciento de la producción ecológica se exporta, y hay quien ha visto en esta un nicho de negocio. También ha opinado que regiones como Asturias tienen una oportunidad en el comercio ‘online’ y deberían potenciar más la exportación de su producción, que ha tildado de mucha calidad.
También ha animado a intentar captar los fondos europeos de Next Generation, en el PERTE Agroalimentario, que parece, según él, no están llegando a muchas pymes. “No debemos perder la oportunidad de estos fondos”, ha trasladado al sector, al que ha advertido de que posiblemente no haya otra como esta.
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