ESSEN (ALEMANIA), 23 (dpa/EP)
El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, volvió a pedir a los políticos que permitan una separación entre deporte y política en relación con un posible regreso de los deportistas de Rusia y Bielorrusia a los Juegos Olímpicos y otros grandes eventos, porque si estos son excluidos por la guerra en Ucrania se podría ir dando paso “al declive del sistema deportivo internacional”.
Durante su intervención este miércoles en un foro en la localidad alemana de Essen, el alemán recordó que si los políticos toman decisiones sobre quién puede o no participar en competiciones deportivas por motivos políticos, entonces el deporte y los deportistas “se convierten en un mero instrumento de la política”. “Entonces es imposible que el deporte transmita sus valores comunes”, afirmó.
Desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania, los deportistas rusos y bielorrusos tienen prohibida la participación en la mayoría de los grandes acontecimientos deportivos, con excepciones como el tenis, pero el COI estudia ahora la posibilidad de que regresen como neutrales, incluso para los Juegos Olímpicos de París del año que viene, lo que ha levantado una ola de rechazo y las amenazas de un posible boicot a la cita.
“Es un dilema para nosotros y una situación completamente nueva, Si les excluimos por razones políticas, nos enfrentamos al declive del sistema deportivo internacional”, consideró Bach, que si se llega a ese punto se empezarían a ver “Juegos organizados por diferentes bloques políticos que no representan en absoluto la naturaleza unificadora del deporte a través de las fronteras”.
“Sólo la historia decidirá quién ha contribuido más a la paz. Los que intentan mantener abiertas las líneas de comunicación y fomentan el diálogo, o los que aíslan y dividen”, añadió el presidente del COI que solicitó que le deseen “suerte” de cara al importante Comité Ejecutivo de la semana que viene.
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