La titular de Justicia asegura que “veremos el fin de la prostitución aunque parezca un sueño irrealizable”
VALENCIA, 22 (EUROPA PRESS)
La consellera de Justicia del Gobierno valenciano, Gabriela Bravo, ha considerado este miércoles que, bajo su punto de vista, la Ley Trans “no tiene arreglo”. Por contra, ha destacado que la proposición de ley que ha presentado el PSOE “va a paliar las consecuencias provocadas por la ‘Ley sólo sí es sí’ para evitar que en hechos futuros los presuntos violadores salgan más beneficiados”.
Asimismo, Bravo, en el desayuno informativo del ‘Fórum Europa. Tribuna Mediterránea’, se ha mostrado convencida de que “sí se verá el fin de la prostitución”, aunque “ahora se vea esta ambición como un sueño irrealizable”. Así ha recalcado que “empresas más difíciles se han llevado a cabo” y en ese sentido ha recordado que la abolición de la esclavitud en España se aprobó hace apenas un siglo.
En ese sentido, ha destacado que “la gran esperanza son los jóvenes” para conseguirlo y por ello ha resaltado que “hay que trabajar con ellos, educarles y hacerles entender que hombres y mujeres son iguales” y que el cuerpo de la mujer “no es un objeto de entrenamiento”.
Bravo ha advertido que con las redes sociales ahora es “más complejo” controlar la información en los menores porque, de hecho, hay “niños que con 8 años acceden al porno”. Por ello, ha recalcado las campañas puestas en marcha para concienciar a los jóvenes.
Del mismo modo se mostrado “muy ilusionada” por “la complicidad importante” de los ayuntamientos de la Comunitat Valenciana que están aprobando ordenanzas abolicionistas. “Ya hay un cambio, estamos diciendo aquí somos todos iguales y el cuerpo de la mujer no está en venta”, ha aplaudido.
Por todo ello, se ha mostrado segura de que algún día esta será “una sociedad de respeto y democracia plena” y “esta generación se preguntará cómo se ha podido mantener tanto tiempo esta explotación sexual mirando hacia otro lado” porque “la prostitución es una forma extrema de violencia contra las mujeres y supone una mercantilización y cosificación del cuerpo femenino incompatible con la dignidad humana y con sus libertades fundamentales”.
De hecho, ha recalcado que “somos la primera comunidad autónoma que se ha propuesto abolir la prostitución y que está liderando ese proceso en toda España, impulsando iniciativas destinadas no solo a modificar leyes sino, sobre todo, a cambiar mentalidades para acabar con esta forma de discriminación machista”.
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