Avisa que algunas medidas contra profesores pueden vulnerar la presunción de inocencia
CERDANYOLA DEL VALLÈS (BARCELONA), 17 (EUROPA PRESS)
La secretaria general y responsable de Políticas de Igualdad de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), Esther Zapater, ha pedido reformas legales para que la universidad pueda agilizar su respuesta ante situaciones de abuso por parte de profesores y hacer el proceso “más ágil y eficiente”.
Lo ha dicho en una rueda de prensa este viernes en el rectorado de la universidad en Bellaterra (Barcelona), con motivo de la suspensión de un catedrático de Física de la UAB tras ser condenado judicialmente por abuso sexual durante dos años a una doctoranda, y del caso de “abuso de autoridad” de un profesor de la Facultad de Filosofía y Letras, suspendido ya de trabajo y sueldo.
Zapater ha explicado que en el caso del profesor de Filosofía y Letras, la denuncia se inició en marzo de 2022 con dos peticiones de activación de la Comisión Técnica Asesora (CTA) del Observatori de Igualtat de la UAB, que se acaban unificando porque es contra el mismo profesor, y que ordenó abrir un expediente disciplinario en septiembre de 2022 y que finalizó este febrero de 2023 con la suspensión del profesor.
Concretamente, ha informado de que la primera petición viene de un conjunto de doctorandas de la UAB que trasladan sus quejas contra este profesor por “mala praxis en la tutorización de la tesis doctoral”; y la segunda petición es por acoso y viene de una persona que había sido doctoranda de este profesor y que tenía relación con él.
La decana de la Facultad de Filosofía y Letras y representante de Políticas de Igualdad de la Facultad, Margarita Freixas, ha afirmado que, desde que tuvieron conocimiento de estas peticiones, desde la facultad tomaron dos medidas: se desdobló la asignatura que impartía este profesor; y se pidió añadir a otra profesora más para esta materia con el fin de “velar para que se hicieran buenas praxis docentes”.
Freixas ha indicado que las alumnas también se quejaban de este profesor porque “hacía un uso inadecuado de las redes sociales”; y que las estudiantes presentaron una queja al decanato con 80 firmas en las que recogían las diferentes malas praxis de este docente, como por ejemplo pedirles ir a conferencias con él porque así les subiría la nota.
La decana ha asegurado que este profesor de Filosofía y Letras no ha hecho clase desde septiembre de 2022 hasta enero de 2023 “por motivos personales”, que entre enero y febrero volvió a la docencia y que en el mes de febrero se le comunicó el expediente disciplinario que suponía su suspensión.
MEDIDAS CONTRA EL PROFESOR
Zapater ha señalado que la medida de apartar al profesor se ha tomado una vez se ha cerrado el expediente disciplinario iniciado en septiembre de 2022 ante las quejas recibidas; y, preguntada por si cree que ha fallado el protocolo, ha señalado que “siempre es posible revisar y ver qué si se podría haber hecho algo más ágil”.
Ha recalcado que el proceso administrativo tiene unos plazos y que “la separación o suspensión del profesor es solo una de las posibles medidas que se pueden tomar, pero que en un estadio muy inicial no se pueden tomar con la legalidad vigente” y que se debe hacer todo este proceso de investigación de los hechos, que culmina con la separación este mes febrero.
Preguntada por si está de acuerdo con las declaraciones este viernes del conseller de Investigación y Universidades, Joaquim Nadal, en las que abogaba por ser más proactivos ante casos de presuntos abusos en la universidad, ha dicho que está de acuerdo pero que para ello serían necesarios cambios legislativos.
“En momentos iniciales del procedimiento no se pueden tomar estas medidas porque pueden suponer una vulneración de la presunción de inocencia, y hacerlo implicaría poner en riesgo cualquier actuación legal, podría implicar una nulidad de pleno derecho”, ha recalcado.
CASO CATEDRÁTICO DE FÍSICA
Preguntada por el caso del catedrático de Física apartado tras la sentencia condenatoria por abuso sexual a una doctoranda durante dos años, Zapater ha dicho que se le ha suspendido cuando tuvieron conocimiento de la sentencia, e insiste en que se hizo acompañamiento legal y psicológico a la víctima, aunque la UAB “no era parte en el procedimiento”.
Ha explicado que, a diferencia del caso del profesor de Filosofía y Letras, a este catedrático no se le pudo apartar porque se abrió la vía penal ante la gravedad de los hechos: “Si hay indicios de delito, la obligación del ordenamiento es que dejemos en suspenso el procedimiento administrativo, y que hasta que no haya finalizado el recorrido penal, nosotros no podemos volver a abrir el expediente” y apartar al docente.
OTROS CASOS
En declaraciones posteriores, uno de los representantes de las víctimas, Ermengol Gassiot, del sindicato CGT, ha asegurado que tienen evidencias de conversaciones de WhatsApp y capturas de pantalla de redes sociales de tanto el profesor de Filosofía y Letras como de otro docente en los que se aprecia “abuso sexual” hacia al menos siete alumnas del grado de Filología Hispánica de la universidad.
También han afirmado que estos dos docentes estaban en contacto a través de redes sociales con alumnas de instituto que iban a hacer la Selectividad para hacerles asesoramiento sobre la prueba, y que “después seguían el contacto con las estudiantes y acababan en relaciones sexuales”, y que al menos tienen constancia de un caso que haya acabado con relaciones sexuales.
Han asegurado que la UAB ha visto estas pruebas y que les ha comunicado que “la respuesta debe ser personal”, es decir, que son las propias alumnas las que tienen que denunciar esta situación dando su nombre y apellidos, cosa que no han hecho y finalmente el abuso de este profesor de Filosofía y Letras ha salido a la luz por la denuncia de las doctorandas.
- Te recomendamos -