MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
El Congreso ha aprobado este jueves definitivamente la Ley de Bienestar Animal y los Derechos de los Animales al aprobar dos tercios de las enmiendas introducidas por el Senado. La norma no incluirá a los perros de caza ni tampoco la obligación de que el dueño y el can pasen un examen de aptitud de sociabilidad.
En concreto, la Cámara ha ratificado 10 de las 15 enmiendas introducidas por el Senado con las que se eliminan varios artículos, el capítulo II completo, y mantendrá la obligación de contar con programas de voluntariado y colaboración de las entidades de protección animal.
Ha ratificado también la enmienda relativa a excluir de entre las prohibiciones generales para que las personas sin hogar puedan seguir teniendo animales de compañía, aunque sea de forma ambulante, para evitar que estos sean multados.
También quedará prohibido, sin excepción, dejar a un animal de compañía sin supervisión durante más de tres días consecutivos y en el caso de los perros este plazo quedaría limitado a no más de 24 horas consecutivas.
Otro de los cambios propuestos por el Senado aprobados en el Congreso es la supresión de la obligación de un test de los titulares junto a sus perros para valorar su aptitud para desenvolverse en el ámbito social y otra más para que ya no sea obligatorio que las administraciones públicas esterilizaran y pusieran un microchip identificativo a cada uno de los gatos que compongan una colonia felina.
También ha salido adelante otra enmienda sobre la función inspectora, de forma que el Ministerio ya no podrá excepcionalmente dirigirse a las comunidades autónomas para que estas ejerzan la función inspectora o bien comunicar al Ministerio fiscal cuando tenga conocimiento de infracciones. Igualmente, se suprime la obligación de que cualquier Ministerio que tenga conocimiento de una infracción sobre bienestar animal pondrá en conocimiento de la autoridad a la que podrá solicitar su actuación.
Asimismo, se modificará la disposición adicional quinta para que quienes tengan animales de especies externas al Listado Positivo de Animales de Compañía tendrán 6 meses para comunicar su tenencia a las autoridades competentes y estas tendrán que adoptar las medidas pertinentes de cara a su intervención y puesta a disposición de centros de protección de especies silvestres, zoos o entidades de protección animal. Igualmente, la Cámara Baja ha acordado eliminar la disposición adicional octava al reconocer que la norma sí puede conllevar gasto.
Sin embargo, el Congreso ha votado en contra de suprimir el artículo 4 y el título II completo –artículos 9 a 12– que contemplan la creación de un sistema centralizado de registros para la protección animal, que se mantiene. Tampoco elimina la obligación de que los planes de protección civil contemplen medidas de protección para los animales, como pretendía el Senado.
También han sido aprobadas las enmiendas al proyecto de Ley de reforma del Código Penal en lo relativo al maltrato animal que llegaron del Senado.
REPROCHES ENTRE LOS GRUPOS
El debate de la ley ha sido un continuo reproche entre los grupos parlamentarios. Por un lado, desde PSOE y PODEMOS han acusado al resto de grupos de la oposición, en particular a PP, Vox y Cs de emitir “bulos” y “mentiras” sobre el contenido de la ley, mientras que desde el resto de bancadas han calificado la norma como una “chapuza” reglamentaria que invade competencias y e impone “dificultades” a los propietarios de animales y que rebajará el reproche por maltratar animales.
En concreto, la diputada del PP, Milagros Marcos, considera que la Ley de Bienestar Animal es un “ejemplo” de todo lo que no debe hacer un Gobierno, al que ha pedido que escuche y rectifique y ha negado que los populares hayan lanzado bulos, sino que ha argumentado que todo ello son artículos del proyecto de ley finalmente aprobado.
Marcos ha advertido de los efectos indeseados de la norma en la saludo pública y ha preguntado a una “ausente Belarra” qué va a pasar cuando haya plagas de topillos o de palomas.
Para la diputada socialista Begoña Nasarre, ha defendido la política útil del Gobierno frente al “apocalipsis” que relatan PP y Vox y ha defendido se garantizará el bienestar de los animales y, al mismo tiempo la actividad cinegética por “responsabilidad y para garantizar una sociedad más justa” y su compañera Gema Araújo ha acusado a Marcos de “mentir”.
Desde Coalición Canaria, la diputada Ana Oramas ha apoyado la ley pero ha pedido regular con un Real Decreto que de “racionalidad a un tema que no es ni político ni ideológico” y se excluya a Canarias del cumplimiento de la norma en cuanto a las colonias felinas y los hurones para proteger la biodiversidad endémica del archipiélago.
Por su parte, desde PNV, el diputado Joseba Agirretxea, cuyo grupo presentó enmienda a la totalidad en el Congreso y propuesta de veto en el Senado –ambas rechazadas– ha reiterado la oposición a la norma por carecer el Estado de título competencial que le habilite para regular una competencia autonómica y por el carácter “centralizador” de una norma “excesivamente reglamentarista”.
“Es una chapuza de ley en todos sus ámbitos, una ley desconfiada que no se fía ni de las administraciones, ni de las entidades ni de las personas”, ha afirmado el diputado que considera que la norma plantea cuestiones “surrealistas” como la realización de “cursillos” que la ciudadanía “se ha tomado a broma”. También ha criticado a la ministra de Asuntos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, de haber logrado enfadar a “muchos grupos” con sus argumentaciones en las que ha calificado de “maltratadores” a quienes no apoyaran la ley.
Además, el diputado de CS, Guillermo Díaz, ha cuestionado la “frivolidad” con la que el Gobierno con el Código Penal para reformar el delito de maltrato y ha pedido una “orden de alejamiento del Gobierno sobre el Código penal”. En cuanto a la Ley de Bienestar Animal, ha calificado el texto como de “auto-ayuda de Podemos” porque son leyes que “no se pueden cumplir” y cuya tramitación ha sido “accidentada”.
Mientras, el diputado de BNG, Néstor Rego, califica de “contradictorio e inconcebible” que la ley de Bienestar no prohíba las corridas de toros que son, en su opinión, la “mayor expresión de maltrato”.
También ha criticado la Ley la diputada de Más País-Verdes Equo, Inés Sabanés, porque dejan fuera de la regulación a los perros de caza, entre otras cuestiones que le han generado una “gran decepción” ya que se abre una “puerta al retroceso, sobre todo en la reforma del Código Penal” porque el Senado no ha corregido los aspectos “más lesivos”.
Desde PdCat, Genís Boadella, ha criticado la ley de Bienestar Animal porque supone que el Estado gane terreno e invada una materia de competencia exclusiva de Cataluña con el amparo de avanzar en derechos sociales.
También ha sido crítico con la reforma, el diputado de ERC, Joan Capdevila ha calificado la ley de Bienestar Animal de “pastiche irremediable” que se queda “muy lejos” de donde debiera” y que consigue “un resultado paradójico: quien maltrata seguirá haciéndolo y quien no lo hace adquiere más obligaciones y debe cumplir más burocracia”, mientras que ha anunciado su apoyo a la reforma del Código Penal a pesar de que el que dejó el Gobierno de Mariano Rajoy es “más estricto con el maltratador” que el que este jueves se aprueba, algo que valora como una “ocasión perdida”.
En cuanto a Unidas Podemos, el diputado Juan López de Uralde ha acusado a varios grupos parlamentarios de “boicotear el debate democrático” al introducir bulos que la “oposición no se ha cansado de repetir”.
En el lado contrario, el diputado de Vox, Ángel López Maraver, ha calificado la ley de “engendro normativo cocinado por un Gobierno incapaz”. “Esto es un absoluto contrasentido que se les va a volver en contra”, ha alertado.
- Te recomendamos -