MADRID, 16 (Portaltic/EP)
España se sitúa como el cuarto país en Europa con más ataques al sector industrial en 2022, donde destacan los ataques con ‘scripts’ maliciosos, el’ phishing’ y los incidentes de denegación de servicio, según el informe ‘ICS threat landscape report’ elaborado por Kaspersky.
Durante los seis últimos meses de 2022, las soluciones de seguridad de Kaspersky bloquearon ‘malware’ de 7.684 familias diferentes que amenazaron sistemas de automatización industrial de sectores como la automoción,la ingeniería o la energía. La cifra es mayor (6%) en comparación con los últimos seis meses de 2021.
El pasado fue el año con mayor porcentaje de equipos de tecnología operativa (OT) afectados por ‘malware’ en todo el mundo (40,6%). No obstante, la situación cambia en función de cada industria: en el segundo semestre de 2022, tanto el sector del automóvil como el energético crecieron en sistemas OT afectados, con un aumento de 4,6 puntos porcentuales (hasta 34,5%) y 1 punto porcentual (hasta 36,9%), respectivamente.
España se sitúa como el cuarto país en Europa con más ataques al sector industrial (26,3%), por detrás de Portugal (33,1%), Estonia (31,2%) y Letonia (29,9%). Los ‘scripts’ maliciosos y las técnicas de ‘phishing’ -que se hacen pasar por una fuente legítima- fueron los ciberataques más frecuentes, suponiendo el 11,6 por ciento del total.
Les siguen los troyanos, las puertas traseras (‘backdoors’) y los ‘keyloggers’ -que monitoriza cada tecla pulsada para extraer información-, con un 8,6 por ciento, y los de denegación de servicio (DDoS), con un 7,6 por ciento.
Desde Kaspersky señalan que el uso de ‘software’ espía también fue tendencia en España, donde se utilizó para acceder de forma remota a equipos, el robo de información personal y el posterior secuestro de datos mediante ‘ransomware’.
PREVISIONES PARA 2023
Para el presente año, la compañía tecnológica predice un cambio en las amenazas avanzadas persistentes (APT) contra las organizaciones y dispositivos inteligentes (OT) en nuevos sectores industriales y localizaciones.
Sectores de la economía como la agricultura, logística y transporte, energía, alta tecnología, farmacéuticas y fabricantes de equipos médicos sufrirán más ataques el próximo año. Los objetivos tradicionales, como los militares y gubernamentales, también estarán en el punto de mira.
Las amenazas también se enfocarán en los transportes no tripulados. Serán tanto objetivos como herramientas de ataque. Además, durante este año, la incidencia geopolítica también tendrá un efecto global en la ciberseguridad industrial.
- Te recomendamos -