ISLAMABAD, 15 (DPA/EP)
Un tribunal paquistaní ha aplazado este miércoles la operación policial para arrestar al ex primer ministro Imran Jan en medio de enfrentamientos entre sus seguidores y las fuerzas de seguridad del país, que se han extendido durante más de 24 horas.
El Tribunal Supremo de Lahore ha ordenado a las autoridades parar la operación hasta las diez de la mañana hora local del jueves, y ha pedido al ex primer ministro que se comprometa a presentarse ante la corte en una fecha específica, algo que solo hará si se suspenden las órdenes de arresto, según ha confirmado su asistente Fawad Chadhry.
Jan está siendo protegido por cientos de simpatizantes y miembros del partido Pakistan Tehrik-e-Insaf (PTI) a pesar de la orden de arresto por más de 80 cargos que emitieron las autoridades, y más de cien oficiales de policía han resultado heridos durante los enfrentamientos con los manifestantes en los alrededores de su vivienda, rodeada por las fuerzas de seguridad y apoyadas por la unidad paramilitar Punjab Rangers hasta el momento de su retirada.
“La casa de Imran se ha convertido en una zona de guerra. La Policía se ha establecido aquí durante las últimas 21 horas”, ha asegurado Chadhry, y ha denunciado que se trata de una violación de los derechos fundamentales. Se trata del tercer intento de arrestar a Jan en las últimas semanas.
Al menos ocho manifestantes han sido heridos después de que la policía usara cañones de agua y gas lacrimógeno en respuesta a las botellas llenas de gasolina que les arrojaron, según ha informado el diario paquistaní ‘Dawn’.
Sin embargo, el primer ministro paquistaní Marriyum Aurangzeb ha asegurado que las fuerzas de seguridad estaban “desarmadas y guardando máxima moderación”, aunque ha admitido que algunos de ellos sí estaban equipados con armamento.
“Claramente el arresto es solo una excusa, porque la verdadera intención es secuestrarme y asesinarme. Han pasado de usar gases lacrimógenos y cañones de agua para recurrir al fuego real”, ha escrito Jan en su cuenta de Twitter. Además, cree que sus opositores están actuando “a instancias de Occidente por ser partidario de Rusia”.
Todo el país está sumido en intensas protestas para evitar la detención del ex primer ministro, que está acusado de ocultar en sus declaraciones de bienes detalles sobre algunos de los regalos que recibió durante su etapa como primer ministro entre 2018 y 2022, cuando fue cesado a través de una moción de censura en el Parlamento. La legislación permite a los funcionarios del Gobierno quedarse con los obsequios siempre y cuando paguen al Estado una fracción de su valor, previamente tasado.
La moción de censura contra Jan fue aprobada después de que el Tribunal Supremo revocara la decisión del entonces primer ministro de disolver el Parlamento y anunciar elecciones anticipadas tras la negativa de la Presidencia del órgano legislativo a celebrar la votación en primera instancia. En noviembre, el ex primer ministro resultó herido de bala tras ser tiroteado durante una protesta contra el nuevo Gobierno.
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