MENORCA, 15 (EUROPA PRESS)
La presidenta del Govern, Francina Armengol, y el conseller de Movilidad y Vivienda, Josep Marí, han entregado este miércoles las llaves de la promoción de 40 alojamientos de dotación en las calles de Francesc de Borja Moll y de Sant Ciril, en Maó, un proyecto de alojamientos intergeneracionales que facilita la vivienda a 30 personas mayores de 65 años, la mayoría de las cuales viven solas, y 10 jóvenes menores de 35 años.
La entrega ha tenido lugar durante un acto en el que también han participado la presidenta del Consell Insular de Menorca, Susana Mora; el alcalde de Maó, Héctor Pons; la gerente del Ibavi, Olvido Terrassa, y el presidente de Cruz Roja Menorca, Arturo Bagur, entre otras autoridades.
Los beneficiarios vivirán en el mismo edificio y compartirán proyecto social, con el objetivo no solo de dar cobertura a la demanda de vivienda para personas mayores y jóvenes, sino también de dar una respuesta al aislamiento, la soledad y la vulnerabilidad del colectivo de gente mayor.
De aquí viene la importancia de los espacios comunitarios que se ubican en la planta baja y que compartirán unos y otros para crear un vínculo de comunidad entre los mismos vecinos y también con su entorno, el barrio.
La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha destacado que con esta primera promoción de viviendas intergeneracionales se potencia un modelo de convivencia “que lucha contra la soledad y da soluciones a dos colectivos prioritarios, como son los mayores y los jóvenes”.
“Las personas, cuando nos vamos haciendo mayores, a lo mejor queremos seguir viviendo en nuestra casa, pero queremos mantener espacios comunes. En este edificio vivirá gente joven que durante la semana cuidará de las personas mayores en sentido amplio y compartirán espacios comunes”, ha indicado la presidenta.
“Hoy no solo hablamos de poner a disposición de la gente una vivienda digna, de calidad, asequible, que también lo es, sino que vamos más allá: respondemos a una necesidad social”, ha explicado, por su parte, el conseller Josep Marí.
“Ponemos nuestro granito de arena para conectar personas mayores y jóvenes, que compartirán este edificio de viviendas, en una apuesta que hacemos desde el Ibavi por el aprendizaje, el intercambio y la ayuda mutua entre unos y otros, que beneficiará a ambos colectivos”, ha añadido.
Según han explicado en una nota de prensa, dentro del proyecto social que acompaña la promoción de estos alojamientos de dotación del Ibavi, los jóvenes tienen el compromiso de dedicar parte de su tiempo a actividades de apoyo y de acompañamiento al resto de vecinos.
En concreto, llevarán a cabo una ayuda semanal de cuatro horas y pondrán en marcha la figura del ‘buen vecino’.
Cada joven, ha explicado la presidenta, tendrá de referencia a tres personas mayores y no se trata de ayuda de tipo asistencial, sino de potenciar la colaboración entre vecinos, de apoyo mutuo, como la que se generaba de forma cotidiana antiguamente en las comunidades y los municipios pequeños.
Como reconocimiento a esta tarea comunitaria, el recibo del alquiler de los jóvenes no superará en ningún caso el 25 por ciento de sus ingresos, cuando la media que aplica el Ibavi en sus promociones es del 30 por ciento para todos los inquilinos.
De este modo, en este edificio, los alquileres que se cobrarán están entre los 192,43 euros y los 475,72 euros, el más elevado.
Además, en esta promoción, 31 de los 40 inquilinos disfrutan de una reducción en el recibo del alquiler, según sus ingresos. Por otro lado, de acuerdo con la política del Ibavi, que concede un tiempo para hacer el traslado con tranquilidad hacia las nuevas viviendas, estos nuevos inquilinos no pagarán su primer recibo hasta el mes de mayo.
Igualmente, según han añadido, esta promoción también es ejemplo de los beneficios que comportan las cláusulas sociales que el Ibavi incluye en los pliegos de licitación de sus contratos. En este caso, la constructora ha colaborado con una aportación de 183.850 euros en actuaciones llevadas a cabo por Cruz Roja Menorca a través del proyecto ‘Personas sin hogar’.
El edificio dispone de 40 alojamientos de dotación, tres de los cuales son adaptados. De estos, 38 tienen un dormitorio y los otros dos disponen de dos dormitorios.
Además, en la planta baja hay 856 metros cuadrados de espacios comunitarios de uso compartido, donde se ubican servicios como la cocina y el comedor autogestionado, un gimnasio, una sala de talleres, una biblioteca y una sala polivalente.
Los alojamientos, que se distribuyen principalmente entre la primera y la segunda planta, tienen entre 46 y 57 metros cuadrados, con un dormitorio, un espacio de cocina, comedor y cuarto de estar, y un baño con lavandería.
Los de dos dormitorios disponen de 80 metros cuadrados y los dos son adaptados. En la planta de semisótano hay un aparcamiento abierto de 14 plazas para servicio del centro.
El edificio dispone de terrazas cubiertas para controlar la irradiación y el calor, ventilación cruzada, aislamientos transpirables, vidrios exteriores de baja emisión para reducir el factor solar, reducción de revestimientos y de un sistema de calefacción y climatización generado mediante aerotermia con el apoyo de 66 paneles fotovoltaicos.
Esta es la sexta promoción de vivienda pública protegida que el Govern ha entregado esta legislatura en Menorca, con un total de 95 viviendas de nueva construcción, la gran mayoría en Maó, y también en Sant Lluís.
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