LOGROÑO, 14 (EUROPA PRESS)
Más del 87% de las agricultores y ganaderos riojanos ven el futuro en la tecnología, aunque solamente un 33% de ellos cambiaría su forma de trabajar para acceder a ella. Es uno de los principales resultados del proyecto ‘Rurales, Agrarios, Digitales y Sostenibles’ (RASD), que están llevando a cabo ARAG-Asaja y AERTIC, en colaboración con otras entidades, para acelerar la digitalización del sector primario.
El secretario general de ARAG, Igor Fonseca, y el presidente de AERTIC, José Luis Pancorbo, han dado a conocer este martes los datos cosechados en la fase de análisis del proyecto, “para conocer -ha señalado Fonseca- el estado de la situación, y, una vez que separmos dónde estamos, poder identificar el camino a seguir”.
“Siempre -ha añadido, con el objetivo de mejorar la rentabilidad del sectro”. Se han realizado en esta fase de diagnóstico un total de 217 encuestas a productores procedentes de 65 municipios de La Rioja, entre agricultores y ganaderos. Un análisis “que nos ha servido para confirmar opiniones, priorizar acciones y poder pensar en poner otras en marcha, para avanzar en la digitalización”.
Así, Fonseca ha incidido en que “una de las certezas más reveladoras es que un 87,2% de los encuestados cree que las nuevas tecnologías y la agricultura de precisión constituyen el futuro de la agricultura, es decir, la tecnología, eso es un porcentaje muy elevado”.
En cambio “sobre su disposición a formarse y cambiar la forma de trabajar, solo un 33% afirma estar dispuesto o muy dispuesto; un 37% no está dispuesto o está poco dispuesto a dar el paso y un 30% se considera estar en una disposición normal para dar el paso”.
El promedio de edad de los encuestados ha sido de 51 años, con estudios que, en más de un 69% de los casos, son de nivel primario o de cursos de incorporación. Sobre el tipo de cultivo, los más importantes son, casi a partes iguales, viñedo y cereal; y, en cuanto al ganado, la mayoría cuenta con ganado vacuno de carne.
RECURSOS Y MEDIOS TÉCNICOS.
Casi la totalidad de los encuestados, un 97,5%, cuenta con internet en sus domicilios, pero solamente un 37,9% lo tienen en las explotaciones. Cerca de un 61% advierte disponer de cobertura en el móvil y/o GPS, un porcentaje que desciende hasta el 50% en el caso de los ganaderos.
Una herramienta, la red, que consideran altamente positiva un 82% de los encuestados, pero que, quienes no lo usan, aducen falta de formación como su principal hándicap. El email también supone un medio importante de comunicación, con un 55% que lo utilizan diariamente. Hasta un 80% hace trámites bancarios online, pero hasta un 95% de los encuestados no usa la firma electrónica.
Respecto a los dispositivos electrónicos, la mayoría, hasta casi un 94%, dice contar con un ‘smart phone’; más un 85%, con ordenador; y algo por encima del 50%, con tablet.
También es mayoritario el uso del WhatsApp (88,7%) y de las app climatológicas, un 82%. Desciende el porcentaje de quienes usan el SIG-PAC, al 65%, mientras que llama la atención que hasta un 83% de los encuestados no utilicen las alertas de plagas o enfermedades.
En cuanto a la tecnología agraria específica, solo un 7% de los encuestados realizan el mapeo de las parcelas; un 72% afirma utilizar habitualmente maquinaria con ordenador; un 17,2 cuenta con tractores con Isobus; y hasta un 45% disponen de GPS. Solo un 16,3% disponen de riego automatizado, con el coste como obstáculo principal para su uso; y, en el caso de los ganaderos, más del 51% cuenta con geolocalización del ganado.
Especialmente crítico ha sido Igor Fonseca con el cuaderno de campo digital, una herramienta de la que disponen y que utilizan de continuo en torno a un 30% de los encuestados, con la formación como principal carencia entre quienes no lo usan habitualmente.
“Lo que no se puede es decretar por norma la digitalización del sector. Estamos en contra de obligar a partir de septiembre de este año el cuaderno digital, como pretende el Ministerio de Agricultura. El sector no está preparado, ni cualificado. Para obligar, antes debería haberse hecho un diagnótico, y haber actuado sobre ello”, ha dicho Fonseca, quien ha pedido a la Consejería que reclamen al Ministerio que la obligatoriedad de esta herramienta “se retrase un par de años más”.
En palabras de José Luis Pancorbo, “lo más destacado es que el sector comprende que las nuevas tecnologías son esenciales para el futuro, y para su competitividad”, si bien ha advertido de ese 33% “que no está en disposición de cambiar su forma de trabajar, algo que no es exclusivo de La Rioja”. Por eso, ha considerado “un reto lograr que entre todos, el sector se considere capacitado para asumir la digitalización”.
Como principal obstáculo, con todo, ha apuntado “a la plena cobertura en las zonas rurales, las administraciones deben implicarse con mayor intensidad en el mundo rural, para que se alcance la cobertura total”. Algo a lo que ha sumado la necesidad de aumentar aspectos “con poca implementación”, como el uso de las alertas de plagas o enfermedades, del mapeo de parcelas o del riego automatizado.
De este modo, en cuanto a la programación predictiva de escenarios futuros, que sería el nivel más avanzado de la digitalización del sector agrario, sólo afirman poseerla un 1% de los encuestados, un 60,5% no la conoce mientras que un 17,7% la considera muy importante. Por su parte, ningún ganadero de los consultados dispone de ella ni la consideran importante en el futuro.
La siguiente fase del proyecto consistirá en acercar esos conocimientos y posibilidades de digitalización al sector agrario y ganadero riojano y, con este fin, se pondrá en marcha una furgoneta itinerante, la denominada ‘TIC Truck’, que recorrerá los municipios riojanos durante cuatro meses, con el equipamiento técnico y los profesionales formados para este fin.
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