ZARAGOZA, 9 (EUROPA PRESS)
El consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, Joaquín Olona, ha subrayado el punto de inflexión que supuso 2015 en la forma de hacer frente a las inundaciones del río Ebro y se ha mostrado optimista “con el cambio de paradigma”.
Hasta esa fecha, el Gobierno de Aragón se había limitado a indemnizar los daños que las riadas producían, comprometiendo el presupuesto de la comunidad autónoma, ha recordado el Ejecutivo en una nota de prensa.
Olona se ha pronunciado así con motivo de su participación en la clausura de la jornada ‘La gestión de los riesgos de inundación en los municipios’, organizada por el Instituto Aragonés del Agua en el marco de la 26 edición del Salón Internacional del Agua y del Medio Ambiente, SMAGUA, que se celebra en Feria Zaragoza hasta este jueves, 9 de marzo.
El Gobierno de Aragón ha detallado que, en 2018, el presidente de Aragón, Javier Lambán, le presentó al entonces presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, el documento de ‘Medidas Urgentes para reducir los riesgos por inundación en el tramo aragonés de la Ribera del Ebro’, informe que luego se remitió a la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.
Sería el origen del eje ‘Ribera sostenible’, dentro del Plan Ebro 2030, que retoma el legado material e inmaterial de la Expo 2008 y mira de forma proactiva a la propia naturaleza del río para asegurar una convivencia segura y productiva en la ribera, han sostenido desde el Ejecutivo regional.
Han añadido que se puso el foco en la coordinación institucional, el desarrollo local participativo y la implicación de todos los agentes y un “hito muy importante” fue la constitución de la Comisión de municipios afectados por las riadas del Ebro, en el seno de la Federación Española de Municipios, Comarcas y Provincias (FAMCP), lugar de debate y encuentro para poner en marcha acciones conjuntas.
“No se puede despreciar el punto de vista de los municipios afectados, incorporarlos al debate ha sido fundamental”, ha destacado el consejero.
TRABAJOS ESTRUCTURALES
Los trabajos estructurales ahora propuestos suponen nuevas oportunidades de mejora, compatibles con la inundación y conservación de la biodiversidad, así como al aumento de la resiliencia de la llanura inundable frente a las avenidas.
Se trata de adaptarnos al riesgo de inundación con el fin de evitar daños en los núcleos urbanos y que los daños en las explotaciones agrícolas sean los menores posibles. “Gran parte de la llanura debe de tener usos de carácter forestal con la intención de que tenga un aprovechamiento y hay determinados usos agrícolas y ganaderos que no pueden darse en esos terrenos”, ha considerado Olona.
El Gobierno de Aragón ha impulsado dos líneas de convocatorias en materia de prevención. Por un lado, se trata de lograr que todos los municipios tengan sus planes de emergencia aprobados. Ya son cuatro las convocatorias realizadas.
Por otro, mantener las riberas, a través de la restauración fluvial y la retirada de los troncos o ramas que dificultan el paso del agua, con dos convocatorias aprobadas, tras unas acciones piloto ejecutadas en 2018-2019.
Según el consejero, “siempre ha sido compleja la relación entre dominio público forestal y fluvial, pero a través de estas convocatorias gestionadas por el Instituto Aragonés del Agua y dirigidas a los municipios, se está haciendo posible la limpieza de las riberas”. Ha añadido que, por esa misma razón, “se propuso la compra de tierras”.
CONFEDERACIÓN
Por su parte la Confederación Hidrográfica del Ebro ha actuado en el retranqueo de motas, la permeabilización de infraestructuras, la creación de perímetros de seguridad, áreas de inundación temporal controlada, zonas de amortiguación del flujo y curages, entre otras cuestiones.
Estas primeras medias ya se mostraron eficaces en la riada de diciembre de 2021, que se esperaba como la de 2015 o, incluso peor, y sin embargo los daños fueron sido inferiores, con 20.900 hectáreas afectadas en 2015, 15.000 en 2018 y 11.339 en 2021, ha detallado el Gobierno de Aragón.
Ha añadido que también hay que tener en cuenta los fondos europeos Next Generation del Plan de Recuperación Transformación y Resilencia recibidos en Aragón para ejecutar entre 2023 y 2026 por valor de 6,5 millones de euros. Así, en total, la inversión en prevención para el periodo 2018-2023 es de diez millones de euros.
LA JORNADA Y LAS NUEVAS MEDIDAS
La directora gerente del Instituto Aragonés del Agua, Dolores Fornals, ha explicado las medidas de apoyo de este organismo a los ayuntamientos de Aragón para la gestión de los riesgos de inundación, así como la Estrategia Ebro Resilience y las diferentes convocatorias de ayuda.
La más novedosa ha sido la convocatoria para la compra de terrenos inundables por valor de 300.000 euros, con fondos Next Generation, que saldrá publicada en el Boletín Oficial de Aragón en las próximas semanas. Está dirigida a municipios del tramo medio del Ebro para la compra y adaptación de terrenos, recurrentemente inundables, con el fin de llevar a cabo actuaciones compatibles con la Estrategia Ebro Resilence.
Por su parte, el director general de Calidad y Seguridad Alimentaria, Enrique Novales, ha relatado la nueva línea de ayudas a instalaciones ganaderas en riesgo, dotada con 1.125.000 euros, también en el marco en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
El objetivo de esta subvención es el cese y traslado de las instalaciones ganaderas ubicadas en zonas de elevado riesgo de inundaciones en los municipios aragoneses, desde el límite de la provincia de Navarra hasta la desembocadura del río Aguasvivas. Con esta medida, se pretenden mitigar los efectos de las inundaciones en aquellas zonas con mayor riesgo de afección de estos desastres naturales.
Asimismo, Novales se ha referido a la ayuda compensatoria para zonas agrícolas incluidas en planes de gestión de cuenca fluviales –medida agroambiental PAC–, dirigida a titulares de explotaciones agrarias en el ámbito de aplicación de la intervención que dediquen estas parcelas a cultivos herbáceos plurianuales, compatibles con inundaciones periódicas como la alfalfa.
LOS MUNICIPIOS
Durante la jornada, también ha intervenido el presidente de la Federación Aragonesa de Municipios, Comarcas y Provincias, Luis Zubieta, para hablar de la gestión de riesgos de inundación en los municipios.
El subdirector general de Protección de las Aguas y Gestión de Riesgos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Javier Sánchez, ha tratado, por su parte, sobre los fondos europeos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia en materia de gestión de riesgos de inundación y Proyecto Ebro Resilience P1.
La jornada ha concluido con la mesa redonda sobre las ‘Buenas prácticas de adaptación y gestión del riesgo de inundación’, moderada por el Comisionado para la Agenda 2030 del Gobierno de Aragón, Fermín Serrano.
En ella, han intervenido el técnico de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Lorenzo Polanco; el jefe de servicio de Protección Civil del Gobierno de Aragón, Miguel Ángel Clavero; el jefe de servicio de Protección de las Aguas y Gestión de Riesgos del ministerio, Juan Francisco Arrazola; y el presidente de la Comisión de Municipios Afectados por el Ebro, Luis Eduardo Moncín.
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