MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
El Banco Santander y la Fundación Integra han apoyado a 15 mujeres victimas de violencia de género con el proyecto ‘De Mujer a Mujer’, que contará con el acompañiento de una quincena de profesionales de la entidad bancaria hacia su integración laboral, según han informado en un comunicado.
Este programa –a través del ‘mentoring’ y la formación– tiene como objetivo reforzar la autoestima y mejorar las oportunidades laborales de estas mujeres. En este sentido, desde 2017 han participado hasta el momento 89 mujeres, de las cuales más del 80% han conseguido un empleo que les ha permitido comenzar una nueva vida gracias a su empleo.
La séptima edición de este proyecto ha comenzado con una sesión formativa para las mentoras participantes, organizada en colaboración con Fundación Humaniza. Durante la jornada, las 15 voluntarias corporativas han conocido la realidad que viven las mujeres que han sufrido violencia y se han formado en conceptos básicos y técnicas del ‘mentoring’.
En este contexto, los impulsores consideran que conocer las herramientas de desarrollo personal y laboral es fundamental para las mentoras, quienes serán las referentes profesionales de las participantes durante seis meses.
“Este programa genera un alto impacto en las mujeres que participan en él, supone para ellas un antes y un después en sus vidas. Gracias a vuestro tiempo y dedicación sois referentes para estas mujeres, acompañándolas en su camino hacia el empleo, vital para salir adelante y no mirar atrás”, ha señalado la directora general de Fundación Integra, Ana Muñoz de Dios.
Las participantes de esta iniciativa realizarán hasta junio diferentes sesiones individuales y actividades grupales como talleres y simulaciones de trabajo, orientadas a la inserción laboral.
Además, en paralelo al proceso de ‘mentoring’ se ha diseñado para estas mujeres un itinerario de integración personalizado que incluye asesoramiento, intermediación, seguimiento y formación en la Escuela de Fortalecimiento de Fundación Integra, un programa con el que trabajarán su fortaleza personal, habilidades y conocimientos. Todo ello orientado a que consigan un empleo que les permita empezar una nueva vida lejos de la violencia contra la mujer, como reiteran los impulsores de la iniciativa.
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