ALMERÍA, 23 (EUROPA PRESS)
Casi uno de cada cuatro estudiantes de la Universidad de Almería (UAL) no usa métodos anticonceptivos en sus relaciones sexuales conforme al estudio sobre la salud de la comunidad universitaria realizado por la institución académica, en el que se señala que el 23 por ciento del estudiantado desecha medidas para la prevención de embarazos.
Según ha trasladado la UAL en una nota, el método de la ‘marcha atrás’ se sitúa como la tercera medida más empleada como sistema para prevenir embarazos, “especialmente entre los estudiantes hombres, con un 8,6 por ciento” de entre quienes utilizan técnicas consideradas preventivas.
Las medidas anticonceptivas más frecuente son el preservativo, que se usa entre el 66 por ciento de alumnos y 50 por ciento de alumnas, y la píldora, que es empleada por el 22 por ciento de alumnas que implementan medida de prevención.
El Vicerrectorado de Deportes, Sostenibilidad y Universidad Saludable incluye estos datos en el estudio que realiza para evaluar diferentes aspectos del estado de salud de los miembros de la comunidad universitaria, tanto de estudiantes como de trabajadores entre los que se incluye el profesorado, investigadores, administrativo y servicio.
Entre los resultados más destacados se encuentra también “la falta de una dieta equilibrada por la mayoría” de los encuestados, especialmente por parte de los estudiantes que presentan “un alto consumo en carne roja, en dulces y snacks, frente a un consumo por debajo de lo recomendado en frutas, verduras y pescado”. Sobre el consumo de alcohol, los datos apuntan que un 19,3 por ciento del alumnado lo consume “mínimo un día a la semana”.
En cuanto al ocio, el estudio refleja que cada vez es “más sedentario” debido al uso de dispositivos móviles, con una creciente presencia de las apuestas y el juego online. “Más de un 20 por ciento de los jóvenes universitarios realiza apuestas deportivas, un 18,2 por ciento en el caso de las alumnas y un 24,7 por ciento en el de los alumnos”, ha indicado la directora del Secretariado para la Universidad Saludable, Patricia Rocamora.
Del mismo modo, se ha observado que más de un 12 por ciento de alumnos juega online con dinero –18,2 por ciento de chicas y 16,1 por ciento de chicos– y más de un 12 por ciento juega en casino o salas de juego como mínimo una vez al mes –10,5 por ciento de alumnas y 15,4 por ciento de alumnos–. Al respecto, la UAL ha detectado que “existe un problema creciente con el uso compulsivo de internet, siendo reconocido ya por parte del estudiantado”.
ANSIEDAD, DEPRESIÓN Y ESTRÉS
La directora de la Unidad de Atención Psicológica de la UAL, Francisca López, ha desgranado algunos de los datos relativos al bienestar psicológico, que reflejan que el 41,2 por ciento de los estudiantes padecen de ansiedad severa o extremadamente severa; mientras que el 25,9 por ciento presenta depresión severa o extremadamente severa y el 18,1 por ciento, estrés severo o extremadamente severo.
“Los datos son menos significativos en PAS y PDI”, han observado desde la UAL, donde señalan que en cuanto a las áreas más afectadas durante el periodo de pandemia, para los estudiantes fueron la mala condición en salud mental, la interrupción de rutinas diarias, la interrupción de metas y proyectos y el aislamiento social. Para PAS y PDI, la interrupción de rutinas diarias, la mala condición física y, el aislamiento social.
Para atender a las necesidades de atención psicológica de la comunidad universitaria con mayor rapidez, López, ha pedido que se aumente el personal de la Unidad de Atención Psicológica de la UAL. “Somos sensibles a los problemas de salud mental, de hecho, la UAL es pionera en aprobar el primer protocolo universitario de prevención de la conducta suicida”, ha recordado.
Aún así, ve conveniente “generar cultura de dar importancia al bienestar psicológico, emocional y vital, fomentando y facilitando que los entornos en los que nos desenvolvemos sean amables, donde los retos que se les pone al estudiantado y al personal sean asumibles y que en aquellas situaciones donde aparezca alguna dificultad se puedan poner en marcha los apoyos necesarios”.
Por su parte, para mejorar los hábitos de vida saludable y hacer frente a los problemas crecientes que está provocando internet, los juegos online, las apuestas, así como para llevar una vida sexual saludable, Rocamora, ha explicado que “se irán desarrollando diferentes acciones, actividades y campañas formativas”.
MÁS DE 1.400 ENCUESTAS
Esta evaluación, que se ha ampliado tras el periodo de confinamiento estricto y las restricciones sanitarias más intensas por la pandemia de covid-19, ha permitido evaluar 1.402 encuestas –1.088 estudiantes, 194 PDI y 120 PAS– realizadas entre el 12 de octubre de 2021 y 1 de enero de 2022 distribuidas a través de redes sociales y canales internos (listas de correo electrónico) de la Universidad de Almería.
El tipo de muestreo fue casual/accidental. El cuestionario fue diseñado y administrado mediante LimeSurvey y el metodólogo del estudio ha sido por el doctor Jorge Ordóñez. Los objetivos de ese estudio han sido contar con información procedente de los miembros de la universidad sobre sus hábitos de salud y estado de salud, permitiendo esta proponer y promover actuaciones preventivas y de atención en la dirección de mejorar la salud y el bienestar de los universitarios, dentro de las competencias de la propia universidad.
Por otro lado, se persigue conocer en qué medida los cambios académicos, laborales y sociales podrían estar afectando a los distintos colectivos y podrían influir en el funcionamiento general de la institución. Todo ello poniendo la atención y la intención en facilitar la transición a la normalidad, atendiendo las dificultades que pudieran aparecer.
El cuestionario contenía preguntas sociodemográficas y antropométricas; preguntas relacionadas con el estilo de vida (alimentación, ejercicio físico, actividades de ocio, consumo de drogas, apuestas y juegos de azar, uso de internet, sexualidad, hábitos de descanso); preguntas sobre salud (salud percibida y enfermedades) y, por último, preguntas sobre bienestar psicológico, como satisfacción con la vida, percepción corporal, depresión, ansiedad y estrés, conducta suicida, valoración de necesidades de atención psicológica en el ámbito académico, información/ayuda, impacto de la pandemia, servicio de atención psicológica.
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