VALÈNCIA, 22 (EUROPA PRESS)
Las temperaturas se han ido recuperando en los últimos días en la Comunitat Valenciana, pero se avecina un cambio de tiempo a partir del viernes, con tiempo plenamente invernal durante el fin de semana y el inicio de la próxima.
Este mes acabará con una temperatura media prevista 1,3 grados por debajo del promedio normal, con lo que será el febrero con la anomalía fría más acusada desde el de 2018, explica la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en su cuenta de Twitter.
Estos días, la Comunitat tiene temperaturas normales para la época en el litoral, algo más altas en el interior, aunque en los próximos penetrará un frente frío activo por el noroeste de la Península y, tras su paso, tendrá lugar la irrupción de una masa de aire polar.
A partir del viernes se notará el descenso térmico, tras lo que el frío más intenso se registrará los primeros días de la próxima semana, con una temperatura media que podrá bajar de 3 grados.
Este cambio de temperaturas llegará después de un inicio de 2023 muy cálido. A partir del 20 de enero hubo un brusco descenso de temperatura y, con ligeros altibajos, desde entonces las temperaturas han permanecido por debajo de los valores normales de estas fechas de forma persistente, aunque sin grandes fríos.
En la ciudad de València, la temperatura media mensual de febrero más baja se registró en 1956 con una mínima de -7,2 grados el día 11 de ese año. Fue la mayor ola de frío en la Comunitat Valenciana en los últimos 125 años.
No es la temperatura más baja registrada en la capital del Turia, ya que la supera la de -8 grados del 18 de enero de 1891. Ese día, el observador meteorológico anotó en su cuaderno: “Extraordinaria helada hasta el extremo de congelarse el agua corriente y reventar las cañerías de hierro de las aguas que están al descubierto congelándose el agua de los riegos hasta las once de la mañana”, recuerda AEMET.
POLVO EN SUSPENSIÓN
Paralelamente, a la espera de la bajada de las temperaturas, la presencia de polvo en suspensión se nota estos días simplemente mirando al cielo y viendo su aspecto blanquecino. Además, hay factores meteorológicos que impiden la dispersión de los aerosoles y los mantienen confinados en un somero estrato atmosférico junto al suelo.
En definitiva, aunque la capa en la que se pueden dispersar los aerosoles en suspensión en el aire es algo más profunda a mediodía, se mantiene la inversión térmica por debajo de mil metros y la atmósfera no está bien ventilada este miércoles.
La causa de que se mantenga la inversión térmica es que por encima de mil metros está entrando aire de origen sahariano relativamente cálido y por debajo hay viento de levante que introduce aire frío que se desliza por el mar con una temperatura en mínimos anuales.
Este miércoles, el Ayuntamiento de València ha activado el protocolo de contaminación ante la presencia de intrusiones de partículas de origen sahariano en la atmósfera. Supone la aplicación de medidas informativas a la población, especialmente dirigidas a personas que sufren problemas respiratorios.
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