MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
Hasta 1.246 personas migrantes han entrado de forma irregular en el país en la primera quincena de febrero, según se recoge en las cifras publicadas por el Ministerio del Interior, que determina que los datos recogidos en 2023 en esta materia suponen una caída de un 60% con respecto a 2022.
Se mantiene así la tendencia a la baja que, en líneas generales, se viene registrando desde finales del año pasado y que se debe a la caída de las entradas de migrantes por vía marítima, especialmente a Canarias. Ahora mismo, la única vía que recoge un aumento, con respecto al año pasado, es la vía terrestre en Ceuta.
En total, Interior ha contabilizado la entrada de 2.538 migrantes en el primer mes y medio de 2023, de los cuales, 953 lo hicieron en la primera quincena de enero y 339 en la segunda, elevándose esta cifra hasta los 1.246 en los últimos quince días. Estas cifras contrastan con las que recogían los informes del Ministerio un año antes: 1.604 migrantes en la primera quincena de 2022, 2.598 en la segunda y 2.158 entre el 1 y el 15 de febrero de 2022.
La mayor caída en las entradas por vía marítima corresponden a las que se han producido en Melilla. En concreto, estas han caído un 91%, al pasar de las 34 que se habían contabilizado entre el 1 de enero y el 15 de febrero de 2022, a las 3 que se han producido en lo que va de 2023. Le siguen las entradas a Canarias, que bajan un 66% (de las más de 4.750 del año pasado, a las 1.602 de lo que va de 2023), mientras que las que se han registrado a través de la costa de la Península y Baleares han bajado un 43,8% (de las 1.437 del primer mes y medios de 2022 a las 808 del mismo periodo de 2023).
Por su parte, las entradas por vía marítima en Ceuta han descendido un 36,7%. En esta ciudad autónoma se han contabilizado 12 entradas de migrantes de forma irregular en lo que va de año, mientras que un año antes se registraron 19.
La única subida que se aprecia en los datos del Ministerio del Interior son las entradas por la frontera terrestre de Ceuta. Y es que en 2023 han cruzado de forma irregular la valla de esta ciudad autónoma 101 personas, frente a las 61 que lo habían hecho en el mismo periodo de 2022.
La frontera terrestre de Melilla sí registra una bajada en este sentido, de más de un 75%. En este caso, las entradas en 2023 no superan la docena, mientras que entre el 1 de enero y el 15 de febrero de 2022 se habían contabilizado hasta 48 entradas.
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