La Junta General celebró un emotivo homenaje, que incluyó el ‘Canto a la libertad’ de Labordeta
OVIEDO, 3 (EUROPA PRESS)
El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, ha pedido este viernes “perdón por el olvido” a las víctimas asturianas del exilio y deportación a campos nazis y ha recogido “el sentir y los planteamientos” de las familias para buscar “un emplazamiento” que sirva “de recuerdo colectivo”.
Al respecto, ha planteado el Campo San Francisco de Oviedo como posible ubicación de un monolito o placa para recordarles con “nombres y apellidos”, contando para ello, ha añadido, con la autorización del Ayuntamiento.
“Este mediodía nos acompañáis decenas de familiares de las personas deportadas. En nombre del gobierno, os pido perdón. Pero no perdón por la memoria. Al contrario, perdón por el olvido”, ha dichodurante su intervención en el homenaje a los asturianos y asturianas deportados a campos de concentración nazis organizado en la Junta General del Principado de Asturias.
Un emotivo acto que incluyó la lectura de los nombres de las 190 víctimas documentadas y la interpretación del ‘Canto a la libertad’ de José Antonio Labordeta en la voz y guitarra de José María Aladro.
Adrián Barbón ha reconocido que Asturias “tenía y sigue teniendo una deuda pendiente con quienes pasaron por los campos de exterminio de Hitler”, al igual que “con los que soportaron los campos de concentración franquistas, como el de Arnao, en Figueras”, que desde el Principado seguirán “recuperando para la memoria histórica”.
Para el presidente, el homenaje ha sido “un acto de reparación y justicia”, a la vez que ha valorado la labor desarrollada de forma altruista por el grupo de trabajo sobre las deportadas y deportados de Asturias. “Gracias a vuestra tarea, un centenar de biografías ya pueden consultarse en la web de memoria democrática. Toda la documentación será donada al Archivo de Asturias, para que quede bien resguardada del viento helado del olvido”, ha remarcado.
En la misma línea, el presidente de la Junta General, Marcelino Marcos Líndez, ha abogado por no olvidar “nunca” a los deportados. “Mantengamos viva su memoria y combatamos el discurso del odio, con su ejemplo vital para que algo así no se vuelva a repetir”, ha argumentado.
El presidente del parlamento autonómico, que entiende que “es de justicia que la Junta General del Principado de Asturias tenga este gesto con el drama del exilio y la deportación”, espera que este acto haya sido también, “una advertencia contra el totalitarismo, la intolerancia, el racismo y la xenofobia”.
En el homenaje, al que acudieron entre otras autoridades la delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa; los vicepresidentes primera y segundo de la Cámara, Celia Fernández (PSOE) y Pablo Álvarez-Pire (PP); y los portavoces parlamentarios de PSOE, Podemos e IU; intervinieron también Esther Martínez Álvarez, representante del Grupo Deportados Asturias, y José Manuel López Alonso, representante de las familias.
Los familiares agradecieron el homenaje, aunque lamentaron que no se hubiera producido antes y pidieron a la administración una placa con los nombre en un espacio público así como “implicarse más” en la recuperación de la memoria democrática.
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