JAÉN, 12 (EUROPA PRESS)
El alcalde de Jaén, Julio Millán, ha presidido este jueves junto a miembros del equipo de Gobierno, de representantes de la Corporación y del obispo de Jaén, Sebastián Chico, entre otros, el acto de reconocimiento de la que fuera durante 16 años directora de Cáritas en La Magdalena, Inmaculada Domingo Domingo, voluntaria activa en esta entidad durante más de 3 décadas y que falleció hace dos años.
En este acto se ha contado con la presencia de su viudo, Rafael Cárdenas, y sus hijos Domingo y Mario y el actual director de Cáritas, Antonio Gallardo.
El Ayuntamiento de Jaén, atendiendo además una petición social rubricada por colectivos y personas que han testimoniado el trabajo solidario de Inmaculada, aprobó el pasado noviembre de 2022 la designación con su nombre de una calle en el barrio de La Magdalena, junto al centro de salud, el barrio que centró su labor durante tantos años y donde Cáritas despliega un importante trabajo.
Julio Millán ha señalado que con este reconocimiento de la ciudad y el barrio de La Magdalena en particular “se rinde homenaje a una mujer que se dio a los demás, gracias a su espíritu inquieto, capacidad de trabajo y de convertir la adversidad en oportunidad y, todo ello, con bondad y humildad”.
Su ejemplo, ha dicho, “hace que nos sintamos orgullosos de que en Jaén gente como ella haya venido a dejar una huella positiva”. “Designar esta calle con su nombre es una forma de seguir teniéndola cerca de quienes la recuerdan con alegría y con un sentimiento de gratitud”.
“Inmaculada tenía que seguir en cierta forma al alcance de su gente, viva en el recuerdo y en estas calles y cuando se nos planteó este gesto sencillo pero significativo, con un importante y abrumador apoyo de testimonios y adhesiones que dan fe de cuánto abarcaba su figura, este equipo de Gobierno no tuvo dudas de rubricar en pleno este mandato social”, señala.
Mario, uno de los hijos de Inmaculada, encargado de intervenir en el acto en nombre de la familia, ha agradecido el gesto tan simbólico del Ayuntamiento y ha reconocido estar “abrumado” por la cantidad de personas que les han acompañado en esta jornada, lo que demuestra la huella de su madre en el barrio.
“Desde pequeños la recordamos Magdalena arriba y abajo ayudando a los demás”, señala. Por su parte, el obispo de la Diócesis, Sebastián Chico, ha indicado la satisfacción de ver “cómo una persona es tan querida por su parroquia, por su barrio y por su ciudad”.
Enrique Díaz, voluntario y amigo de Inmaculada Domingo en su etapa en Cáritas, destaca el trato que dispensaba a las personas “siempre dispuesta a todo, siempre con una sonrisa, lo que es un verdadero voluntario”.
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