MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
Las estaciones de Grandvalira Resorts cerraron el período navideño con cifras de visitantes satisfactorias, ya que entre el 19 de diciembre y el 8 de enero, un total de 407.000 esquiadores han pasado por Grandvalira, Pal Arinsal y Ordino Arcalís, datos similares, aunque ligeramente inferiores, a los obtenidos el pasado año en estas fechas.
De esta forma, Andorra se ha afianzado una vez más como uno de los destinos principales escogidos para pasar las fiestas de Navidad, y afronta las próximas semanas con buenas previsiones de visitantes, principalmente provenientes de los mercados internacionales.
Grandvalira Resorts hace una valoración positiva de este período navideño, pese al ligero descenso del tres por ciento, que hizo pasar de los 420.000 esquiadores del anterior a los 407.000 de este último. En este sentido, el complejo destaca que, durante las dos primeras semanas de las vacaciones, las estaciones andorranas han registrado una ocupación en las pistas ligeramente superior a la del pasado invierno, mientras que en la última, la primera de enero, ha habido un ligero descenso.
Asimismo, Grandvalira ha sido la estación que ha acogido a más esquiadores durante este período, con 298.000 visitantes, seguida de Pal Arinsal, que ha acogido a 73.000, un ligero descenso respecto al año pasado que se compensa con el aumento del gasto medio por cliente, el cual ha crecido notablemente.
Por su parte, Ordino Arcalís ha recibido a 36.000 esquiadores durante el período navideño, y en el acumulado hasta ahora de la temporada ha registrado una subida de visitantes del 60 por ciento respecto hace un año, debido a las buenas condiciones de la estación y a los cierres que la perjudicaron al inicio del pasado invierno.
Según indican desde Grandvalira Resorts, la media diaria de esquiadores en las pistas estos días ha sido de 19.380, siendo el 28 de diciembre el de mayor afluencia global con 32.234 personas, con una ocupación de 24.168 esquiadores en Grandvalira, de 5.509 en Pal Arinsal y de 2.566 en Ordino Arcalís.
“La previsión para el resto de enero y de la temporada a nivel de reservas es muy buena, por lo que esperamos seguir recibiendo un número de esquiadores similar al de la temporada pasada, que fue excepcional”, celebra el director general de Grandvalira Resorts, Juan Ramon Moreno.
Por otra parte, a pesar de la falta de precipitaciones en forma de nieve y las altas temperaturas generalizadas en el Pirineo y en buena parte de Europa durante el mes de diciembre, los dominios del Principado se han mantenido con un elevado número de pistas abiertas.
Así, la garantía de nieve de las estaciones andorranas y el excepcional trabajo de los equipos de terreno han permitido que Grandvalira haya tenido entre 109 y 132 kilómetros esquiables con espesores de hasta 35 centímetros durante el período navideño, siendo la estación con más kilómetros disponibles en toda la Península.
Pal Arinsal ha mantenido en todo momento más del 85 por ciento de las pistas abiertas con espesores de hasta 40 cms y Ordino Arcalís más del 80 por ciento de las pistas con hasta 55 cms de nieve. Con estas cifras, las estaciones andorranas han sido, de nuevo, de las que han podido ofrecer mejores condiciones de todo el Pirineo.
De cara a las próximas semanas, las previsiones meteorológicas auguran un descenso de las mayores temperaturas y nevadas, especialmente los días 15 y 16 de enero. “Durante la primera semana de enero ya hemos tenido unas condiciones más favorables, con algunas nevadas débiles y temperaturas bajas que han permitido producir algo de nieve de cultivo”, advierte Moreno.
Además, las actividades tradicionales navideñas han sido muy bien acogidas por parte de los visitantes de las tres estaciones, entre las que han destacado las visitas de Papá Noel a los diferentes Jardines de Nieve de Grandvalira y Ordino Arcalís, así como el Cagatió y la visita del Paje Real a Pal Arinsal.
Las acciones estrella han sido las bajadas de antorchas del Pas de la Casa, que acogió a más de un millar de espectadores, así como la bajada de antorchas de Soldeu y la bajada de lucecitas de Soldeu, en las que participaron más de 200 personas en cada una de ellas, además del público asistente. Esta última sirvió también como escenario para reanudar el camino a la promoción de Andorra como candidata para acoger los Campeonatos del Mundo de Esquí Alpino en 2029 con un gran espectáculo de luces led.
Los establecimientos de restauración y las escuelas de esquí han funcionado prácticamente al cien por cien, así como las actividades de Grandvalira Resorts que también han rozado la plena ocupación. Entre ellas, en Grandvalira han destacado el ‘mushing’, las motos de nieve, el ‘Mon(t) Magic Family Park’ de Canillo y el esquí nocturno en el Pas de la Casa, mientras que en Pal Arinsal han tenido una muy buena acogida las actividades para los más pequeños, especialmente la pista de trineos, el ‘tubbing’ y el ‘Big Airbag’, y en Ordino Arcalís las excursiones guiadas con raquetas en el Port del Rat y en el Mirador Solar de Tristaina.
L’Abarset, por su parte, ha disfrutado de un gran ambiente ‘après-ski’ cada día con los DJ y fiestas que han llenado el local. Las jornadas más destacadas han sido el 30 de diciembre con la primera edición del festival Greenworld en Grandvalira, el 31 de diciembre con Viviana Casanova y el 6 de enero con la segunda edición del Brunch -In The Snow. Sólo estas tres citas han acogido alrededor de 4.300 personas.
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