MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
La patronal de dependencia CEAPs se ha mostrado partidaria de “no endurecer” las medidas anticovid en las residencias de mayores, aunque ha asegurado que están “vigilantes” ante la explosión de casos en China, y ha pedido a la sociedad que “extreme precauciones” en las fiestas navideñas.
“La elevada transmisión del coronavirus en China obliga a estar en alerta y a mantener una vigilancia activa sobre su evolución”, ha señalado CEAPs en un comunicado, recogido por Europa Press.
En todo caso, lanza un mensaje de “tranquilidad” a los familiares y asegura que los centros están preparados para adoptar de forma urgente los protocolos pertinentes, de la mano de las instituciones.
“La experiencia y el aprendizaje en estos tres últimos años permite a las residencias estar preparadas para adoptar de forma urgente los protocolos que se consideren oportunos ante situaciones sobrevenidas, siempre de la mano de las instituciones”, apunta la patronal.
Además, afirma que los centros continúan contando con planes de contingencia, con stock de materiales y que el uso de las mascarillas para los trabajadores de los centros y los visitantes sigue siendo obligatorio.
En este sentido, pide a las administraciones, central y autonómicas, la “máxima coordinación” con el sector para, “juntos, tomar las medidas pertinentes” y “una coordinación sociosanitaria real que impida que se vuelvan a producir situaciones de edadismo, como las vividas en la primera ola del coronavirus”.
“Estamos, como siempre hemos estado, dispuestos a colaborar con las administraciones para proteger a nuestras personas mayores”, ha subrayado CEAPs.
A la espera de ver cómo evoluciona la situación en China, la patronal hace un llamamiento a la sociedad para “extremar las precauciones”, sobre todo, en los contactos familiares que se intensifican durante estas fiestas de Navidad, para proteger a las personas más vulnerables y, en especial, a aquellas que viven en centros residenciales.
En cualquier caso, CEAPs opina que la situación en España “dista mucho” de la que se vive en China, debido a las altas tasas de vacunación entre la población española, a la elevada inmunidad alcanzada por sus habitantes y a la eficacia demostrada por las vacunas occidentales.
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