CASTELLÓ, 22 (EUROPA PRESS)-
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer 1 de Vila-real (Castellón) ha acordado la libertad provisional para el detenido el pasado domingo en Onda por supuestamente retener a su pareja en una vivienda de dicha localidad durante más de un mes y ha dictado una orden de protección a favor de la víctima.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), está investigado inicialmente por delitos de lesiones, amenazas y maltrato familiar en el ámbito de la violencia de género, sin perjuicio de ulterior calificación.
Fue puesto el pasado lunes a disposición del Juzgado de Violencia sobre la Mujer 1 de Vila-real. De conformidad con el criterio del Ministerio Fiscal, el juez acordó la libertad provisional y dictó una orden de protección a favor de la víctima.
La orden de protección prohíbe al investigado acercarse o comunicarse con la víctima por cualquier medio y le impone la colocación de un dispositivo telemático (pulsera) para su control permanente por las autoridades. Además, deberá acudir cada 15 días a firmar en sede judicial.
La Policía Local detuvo al hombre, de 33 años, el pasado domingo por supuestamente retener durante más de un mes a su pareja en un domicilio de dicha localidad, según ha podido saber Europa Press de fuentes conocedoras del caso.
La Policía Local recibió una llamada de una mujer en la que indicaba que la víctima la había alertado de que su pareja la tenía encerrada en un piso -según declaró la víctima- desde hace más de un mes.
La Policía observó que la mujer presentaba marcas de agresiones en el cuerpo y detuvo a su pareja por los delitos de violencia de género y detención ilegal. La víctima, de 21 años, ha sido trasladada a un recurso público.
Según informó el periódico Mediterráneo, la mujer logró escapar el pasado domingo de la vivienda donde permanecía retenida y pidió auxilio. La mujer permanecía en una habitación del domicilio, cerrada con una cadena y un candado.
En un descuido de su captor para ir al servicio, habría conseguido quitarle la llave de la casa y encerrarlo a él en el piso que compartían para, posteriormente, pedir auxilio, según la misma publicación, que añade que, al parecer, la mujer había estado sometida a un clima de violencia desde que llegara a España el pasado mes de noviembre. En ese contexto, se habrían producido amenazas y agresiones físicas.
La Guardia Civil se hizo cargo del caso, cuyas diligencias pasó al Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vila-real.
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