MADRID, 16 (SERVIMEDIA)
Un total de 64 universidades de la Unión Europea forman parte de la Red Europea de Universidades Inclusivas EUni4All-Network, dirigida a impulsar la movilidad internacional de los estudiantes con discapacidad en la UE y a construir un espacio de educación superior “verdaderamente inclusivo”.
Así lo explicó este viernes en Bruselas la jefa de Departamento de Programas con Universidades de Fundación ONCE, Silvia Duarte, en la presentación oficial de la Red, que definió como “un proyecto muy abmicioso, fruto de la unión de muchas instituciones muy comprometidas”.
Sin embargo, “lo que hoy presentamos no es ningún resultado final”. “Esto es solo el principio”, y animó a todas las universidades de la UE y a otras instituciones a unirse a esta iniciativa. “Cuantos más socios seamos, mejor”, afirmó.
La nueva Red forma parte del programa Erasmus+ Red de Universidades Inclusivas (EUni4All-Network), impulsado por Fundación ONCE con la colaboración del Foro Europeo de la Discapacidad (EDF) y siete universidades comunitarias: la Universidad Oriental de Finlandia, la Universidad de Oporto (Portugal), la Universidad del Estudio de Trieste (Italia), la Universidad Politécnica de Lublin (Polonia) y las universidades españolas de Murcia, Sevilla y Autónoma de Madrid.
Iniciado en 2019 y cofinanciado por el programa Erasmus+ de la Unión Europea, el proyecto culmina con la presentación de una plataforma web que permite al alumnado con discapacidad buscar las mejores opciones para estudiar fuera de su país de origen y la puesta a disposición de tres guías: una de indicadores que establecen estándares de inclusión para las universidades europeas; otra guía de universidades que trabajan por la inclusión y que han realizado una autoevaluación en base a estos indicadores, y una última para facilitar la impartición de talleres de formación a personal docente y administrativo de las universidades.
CUMPLIR CON LA CONVENCIÓN
EUni4All busca ayudar en el desarrollo, ejecución y evaluación de buenas prácticas y políticas que contribuyan a alcanzar una educación de calidad para las personas con discapacidad, tal como plantea el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 4 y tal como dicta la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, firmada y ratificada por la Unión Europea. Asimismo, pretende contribuir a una mayor movilidad internacional del estudiantado universitario con discapacidad.
Según apuntó Isabel Martínez, directora de Programas con Universidades de Fundación ONCE, “el miedo, la falta de accesibilidad, los costes extra que supone la discapacidad y la imposibilidad de recibir las mismas prestaciones y servicios en otros Estados” son las principales barreras que los estudiantes con discapacidad encuentran para irse de Erasmus. La misma idea apuntaron varios participantes presentes en el acto.
“Esto no solo ocurre en España”, prosiguió, sino que “es un fenómeno que sucede en todos los Estados miembros y merma las oportunidades de desarrollo académico de las personas con discapacidad”, lamentó Martínez.
De acuerdo con dicho tratado internacional, Estas “tienen derecho a una educación de calidad en igualdad de oportunidades”, pero los Estados y la propia UE incumplen tal exigencia en la actualidad.
Por este motivo nació la red EUni4All dentro de la Estrategia Europea de Inclusión y Diversidad de Erasmus+ y Cuerpo Europeo de Solidaridad. Su objetivo fundamental es incrementar de forma considerable el número de estudiantes con discapacidad que participan en programas de movilidad internacional.
INDICADORES
En la presentación participó Alice Ribeiro, de la Oficina de Discapacidad de la Universidad de Porto, quien destacó “las múltiples barreras” con las que estos estudiantes se encuentran.
“Para lograr un ambiente verdaderamente acogedor e inclusivo (con este alumnado) es preciso un cambio estructural, que va mucho más allá de solventar obstáculos físicos”, afirmó.
Por este motivo, “el primer paso de la red fue la elaboración de una guía con 38 indicadores, que permitiese evaluar el grado de inclusión de nuestras universidades”, explicó. Se trata “del primer instrumento de autoevaluación creado en Europa” con el fin de que las universidades analicen sus prácticas, cultura y políticas de inclusión de estudiantes con discapacidad.
Ofrece 38 indicadores referentes a la accesibilidad física de los espacios y de sus alojamientos; adaptaciones curriculares; la existencia de personal de referencia para estos estudiantes; los programas de mentoría personalizados; el apoyo a los estudiantes extranjeros; sistemas de evalución accesibles; formación del personal; disponibilidad de actividades de deporte y ocio inclusivas; etc.
A continuación, se prepararon dos cuestionarios que las universidades debían completar para evaluarse, y también se editó una guía completa con los resultados de las 64 instituciones que finalmente participaron. Esta última recoge toda la información facilitada respecto a los citados ámbitos, así como otros recursos de información (páginas web, personas de contacto, teléfonos…).
El cuestionario ‘largo’, de 150 ítems y referido a los 38 indicadores, fue respondido por 33 instituciones, que además debieron aportar “evidencias” de que cumplían tales criterios (se les reconoce con un distintivo azul). La encuesta breve se refiere a 14 indicadores, los más importantes, y fue contestada por 32 universidades (distintivo naranja). Hubo además una decena de instituciones que, aunque no completaron los cuestionarios, sí mostraron interés por participar, pero se limitaron a exponer sus políticas en el ámbito de la inclusión y a reseñar las personas de contacto.
Los resultados de las 64 universidades que respondieron dichos cuestionarios permite hacer un análisis de situación por país y por región, que ayudará a los estudiantes con discapacidad en su toma de decisiones. Para facilitar este proceso, el proyecto ha creado una plataforma web, que presentaron expertos de la universidadPolitécnica de Lublin (Polonia).
Esta herramienta, totalmente accesible, ayuda a los estudiantes a buscar información y facilita a las universidades intersadas responder los criterios de autoevaluación para unirse a la red.
FORMACIÓN Y DIFUSIÓN
Por último, responsables de la Universidad de Malta se refirieron a los talleres dirigidos al personal docente e investigador, diseñados para que estos conozcan cómo atender las necesidades específicas de apoyo educativo de los estudiantes con discapacidad, así como cuestiones básicas de educación inclusiva en el marco universitario.
En 2022 se llevaron a cabo 5 talleres en las universidades de Murcia, Finlandia del Este, Trieste, Lublin y Porto, en los que participaron más de 400 profesores y personal administrativo. La guía para impartir los talleres aporta de manera detallada el contenido de 4 módulos, las actividades, el material didáctico y los métodos de evaluación.
Según todas las encuestas de valoración, los participantes coincidieron en la importancia de la capacitación para conocer buenas prácticas y avanzar en la inclusión”. Durante la presentación, resaltaron la utilidad de la formación de cara a que más instituciones se unan al proyecto.
Este será, de hecho, su siguiente objetivo, además de darlo a conocer entre expertos, universidades, familias, asociaciones y las propias personas con discapacidad.
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