Cuando ocurrieron los hechos la primera contaba con entre 10 y 12 años y la segunda tan solo 3 años
BURGOS, 13 (EUROPA PRESS)
El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha ratificado la condena de más de catorce años de cárcel sobre un vecino de León por abusos sexuales sobre su nietastra cuando ella contaba con entre 10 y 12 años, delito que también cometido a posteriori sobre la hija de ésta cuando tan solo contaba con tres añitos.
La sentencia de la Sala de lo Civil y Penal del TSJCyL, con sede en Burgos, desestima de este modo el recurdo presentado por el condenado y confirma en su integridad la condena de la Audiencia de León, que le impuso una pena global de catorce años, cuatro meses y dos días de cárcel como autor de dos delitos continuados de abusos sexuales, uno de ellos sobre menores de 16 años y otro sobre menores de 13 años, junto con la prohibición de comunicarse y acercarse a la primera durante once años y un día y respecto de la segunda por espacio de cinco años, tres meses y un día.
En concepto de responsabilidad civil, el tribuna leonés le condenó igualmente a indemnizar a sus víctimas en las cantidades de 6.000 y 8.000 euros, según la información del Gabinete de Prensa del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León recogida por Europa Press.
Los hechos se remontan al día 4 de marzo del 2019 cuando el condenado se encontraba en su domicilio, en León capital, y aprovechándose de su condición de abuelastro de la madre de la menor y de que se encontraba a solas con ella, de tres años, le introdujo la mano en el interior de la ropa y le tocó su zona genital, introduciéndole el pene en la boca de la niña para que se la chupara, indicándole que como premio le daría unas chuches.
Así mismo, en fechas no determinadas, cuando la madre de la menor tenía entre 10 y 12 años, en numerosas ocasiones, el procesado, aprovechándose, igualmente, de la situación de familiaridad derivada de ser su abuelastro, en las momentos en que se encontraba a solas con ella en el domicilio del mismo, le tocaba su zona genital con las manos, le mandaba tirarse al suelo y se tocaba los genitales delante de ella y la obligó a hacerle felaciones, premiándole con la entrega de chuches.
En una ocasión llegó incluso a desnudarla e intentó penetrarla vaginalmente, sin conseguirlo, si bien eyaculó encima de ella.
La víctima interpuso denuncia por estos hechos el 23 de abril del 2019, incoándose el correspondiente procedimiento el 26 de abril de 2019.
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