MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
Los Grupos Locales de SEO/BirdLife han cumplido 30 años desde que en 1992 surgieran ante la necesidad de distintos grupos de socios de la organización de desarrollar acciones locales que ayuden a las aves y los espacios en los que viven. En los últimos cinco años, más de 160.000 personas han participado en sus actividades en 14 comunidades autónomas.
Este aniversario coincide con el Día Internacional del Voluntariado, que se celebra este 5 de diciembre, coordinado por el programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU), que reconoce y promueve la labor de las personas voluntarias en todo el mundo. Este 2022 tiene como el lema ‘La solidaridad a través del voluntariado’, una campaña que destaca el poder de la calidad humana colectiva para impulsar un cambio positivo a través del voluntariado.
“Este Día Internacional del Voluntariado en SEO/BirdLife queremos poner en valor esta iniciativa de los Grupos Locales como máxima expresión de la participación de los socios y simpatizantes de la organización en favor de la conservación de nuestras aves a través de la elección, diseño y ejecución de diferentes actuaciones”, ha señalado el coordinador del Área Social de SEO/BirdLife, Federico García.
En estos 30 años, los Grupos Locales de SEO/BirdLife han pasado de ser 8 incialmente a alcanzar los 42 actuales, con centenares de voluntarios que han contribuído en la “puesta en valor y conservación” del patrimonio natural, tal y como ha indicado García.
Desde SEO/BirdLIfe han apuntado que, en los últimos cinco años, más de 160.000 personas han participado en las actividades que han desarrollado los Grupos Locales de esta ONG, con cerca de 80.000 horas invertidas y con una media de 2.000 voluntarios implicados. Asimismo, han afirmado que estos grupos se encuentran en 14 comunidades autónomas distribuidos a nivel provincial. La organización ofrece más de diez modalidades diferentes de voluntariado al alcance de quién quiera colaborar de forma puntual o habitual.
Además, destacan que iniciativas como los programas de ciencia ciudadana o los encargados de las Áreas Importantes para la Conservación de las Aves y de la Biodiversidad (IBA) facilitan la información necesaria para conocer el estado de conservación de las aves y de los espacios en los que habitan, lo que permite a la organización identificar y dirigir el trabajo de conservación.
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