ZARAGOZA, 30 (EUROPA PRESS)
La Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) ha comenzado la construcción de la planta de transferencia de Alagón. Los trabajos han sido encargados a la empresa pública Tragsa por 991.741 euros y está previsto que se prolonguen cuatro meses.
Se trata de la última de la seis instalaciones de este tipo previstas para la puesta en marcha del proyecto Ecoprovincia, el servicio público que permitirá que los municipios de toda la provincia lleven sus basuras a la capital y que puedan cumplir así la obligación legal de reciclar o reutilizar al menos el 50 por ciento de sus residuos domésticos y comerciales.
La planta de transferencia de Alagón se ubica junto a la salida del municipio hacia Gallur por la carretera VP-24. Una vez en funcionamiento, recibirá unas 10.300 toneladas de basura anuales procedentes de los municipios de la Ribera Alta del Ebro y dará servicio a una población de unas 27.000 personas.
“La planta de Alagón ha sido la última en empezarse porque una vez iniciada su tramitación fue necesario hacer una modificación urbanística, pero estará terminada a principios del año que viene y esperamos que pueda llegar a tiempo para la puesta en marcha del servicio Ecoprovincia”, ha destacado el presidente de la Diputación de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero.
“En cualquier caso, –ha asegurado Sánchez Quero– el pliego del concurso para transportar los residuos hasta Zaragoza establece que, si no es así, los residuos de la Ribera Alta del Ebro se llevarán temporalmente a la planta de transferencia de Borja”.
El presidente de la DPZ ha subrayado, además, que la institución provincial ya ha elegido a la empresa adjudicataria del concurso para transportar los residuos hasta Zaragoza, aunque todavía hay que esperar a que pase el plazo de recurso.
“Si todo va bien, en los próximos días podremos firmar el contrato y a partir de ese momento la empresa tendrá tres meses para poner en marcha por fin el servicio de transporte de las basuras”, ha explicado el presidente, quien ha recordado que con ese paso se culminarán “cinco años de una larga y compleja tramitación administrativa”.
DESCRIPCIÓN
Ecoprovincia es un servicio público de transferencia y transporte de residuos creado por la Diputación de Zaragoza para hacer posible que los municipios de toda la provincia trasladen sus basuras hasta la capital.
La legislación española y europea establece que los municipios deben reutilizar o reciclar al menos el 50 por ciento de sus residuos sólidos domésticos y comerciales.
En Aragón, el único vertedero que permite alcanzar ese objetivo obligatorio es el Centro de Tratamiento de Residuos Urbanos de Zaragoza (CTRUZ) por eso la DPZ ha puesto en marcha el proyecto Ecoprovincia para solucionar este problema ambiental al que se enfrentan los ayuntamientos llevando sus basuras hasta Zaragoza capital.
FUNCIONAMIENTO
La recogida se seguirá haciendo como hasta ahora según el modelo de gestión implantado en cada zona de la provincia; los residuos se llevarán a una planta de transferencia construida y gestionada por la Diputación de Zaragoza.
Allí se compactarán para que ocupen el menor volumen posible. En total va a haber seis plantas de transferencia en La Almunia de Doña Godina, Ejea de los Caballeros, Quinto, Alagón, Calatayud y Borja.
Una vez compactados, los residuos serán transportados desde las plantas de transferencia hasta el CTRUZ de Zaragoza en camiones de 24 toneladas, lo que permitirán optimizar los viajes hasta la capital. De ese transporte también se encargará la Diputación de Zaragoza.
El tratamiento y el reciclado a los que obliga la legislación se llevarán a cabo en el CTRUZ de Zaragoza, ha informado la DPZ en una nota de prensa.
Tanto la construcción de las seis plantas de transferencia –que han costado 6 millones de euros– como el transporte de los residuos desde esas instalaciones hasta el CTRUZ de Zaragoza –presupuestado en 19,1 millones de euros para los 10 próximos años– serán asumidos por la Diputación de Zaragoza.
Los municipios solo tendrán que abonar la tasa por tratar sus basuras en el CTRUZ, aunque a esa cantidad habrá que restarle lo que dejará de pagar cada localidad por llevar sus residuos al vertedero en el que las deposita actualmente.
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