MADRID, 30 (SERVIMEDIA)
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, insistió este miércoles en que en el asalto a la valla de Melilla del pasado 24 de junio “no hubo ninguna pérdida de vida humana en territorio nacional”, a pesar de lo que sostienen algunos partidos políticos y las investigaciones periodísticas de la BBC y el consorcio de medios Lighthouse Reports.
Así lo aseguró Marlaska en el Pleno del Congreso, donde comparece esta mañana para dar nuevas explicaciones sobre el asalto a Melilla de junio, algo sobre lo que ya compareció en la Cámara Baja el pasado 21 de septiembre.
En su intervención inicial, el ministro defendió su versión de los hechos del asalto al paso fronterizo del Barrio Chino de Melilla y donde la mañana del 24 de junio se produjo un asalto de 1.700 personas desde el lado marroquí de la frontera. Las autoridades de Rabat han reconocido que en este incidente murieron 23 personas en su territorio.
Marlaska afirmó que, a pesar de los “intentos de manipular” y las “conjeturas”, la Guardia Civil dio “una respuesta proporcionada y oportuna ante un hecho violento” y en el que “no tuvimos que lamentar ningún hecho trágico, ninguna pérdida de vida humana, en territorio español”.
Insistió en que se produjo “un intento violento de realizar una entrada irregular en nuestro país forzando el perímetro fronterizo” y que los asaltantes portaban “objetos ofensivos”, como “piedras, radiales, mazas o hachas”.
“INSIDIAS” DEL PP
Además, el ministro rechazó “cualquier conjetura, especulación o insinuación” que sugiera que los guardias civiles que actuaron el 24 de junio en Melilla no asistieron a inmigrantes que habían cruzado del lado marroquí y pudieran estar heridos.
Al mismo tiempo, el responsable de Interior anunció que dará protección legal a los guardias civiles de Melilla que puedan afrontar algún tipo de denuncia tras las “insidias” del PP sobre lo ocurrido en el incidente de junio.
Aludía así a que el vicesecretario general Institucional del PP, Esteban González Pons, señalara este martes en rueda de prensa que, de la investigación de Lighthouse Reports, se deduce que guardias civiles pudieron denegar el auxilio a inmigrantes heridos y permitieron que gendarmes marroquíes entraran en España para “llevarse a los heridos y a los muertos”.
El titular de Interior tildó de “insidias” las palabras de González Pons, ya que, a su juicio, acusó a los guardias civiles de cometer “varios delitos de una extraordinaria gravedad”, Por ello, el ministro indicó que ha dado instrucciones en su departamento para que “se haga cargo de la defensa de cualquier agente que se pueda ver afectado por estas declaraciones”.
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