PONTEVEDRA, 25 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Pontevedra ha rechazado los argumentos esgrimidos por el Complejo Industrial de Campañó (Cicasa), perteneciente al Grupo Nogar, e insiste en paralizar el almacenamiento y distribución de cereales y productos forestales desde los almacenes que la compañía tiene en propiedad en las naves de La Cross, en la Xunqueira de Alba.
Una decisión contra la que la empresa ha anunciado que emprenderá acciones legales y administrativas, ya que entiende que esta nave cumple los “parámetros legales de seguridad exigibles para este tipo de actividades e instalaciones”.
La Cross, en la que el Grupo Nogar a través de su filial Galigrain acumula 96.000 toneladas de cereal en grano con fines alimentarios en condiciones similares a las de la antigua Pontesa incendiada en Ponte Sampaio, será precintada de manera cautelar y provisional por orden del Ayuntamiento de Pontevedra.
Con todo, el Grupo Nogar ha anunciado este viernes en un comunicado de prensa que recurrirá esta decisión pues asegura que la nave cumple con los parámetros de seguridad exigidos y, además, se procederá a “la inmediata instalación de nuevos elementos de protección y accesorios”, que “permitirían el normal desarrollo de la actividad”.
La firma considera que, dado que los almacenes están “perfectamente habilitados para prestar su actividad”, tanto por medidas de seguridad como por sus características de almacenaje, se ve “obligada” a elevar acciones legales y administrativas ante otros organismos jurisdiccionales competentes.
Así, avanzan su disposición a acudir incluso a la vía judicial “si fuese necesario”, para intentar que prevalezcan sus argumentos y poder seguir desarrollando su actividad.
La nueva notificación municipal impide a Cicasa almacenar nueva mercancía en sus naves y obliga a ir retirando progresivamente la actualmente almacenada. Por su parte, la empresa destaca que son unos almacenes “estratégicos para el abastecimiento del sector agroalimentario gallego”.
Por último, el Grupo Nogar confirma que Cicasa cumplirá la orden de suspensión municipal “aún a pesar de no compartirla”, dando salida a la mercancía a medida que lo requiera la industria consumidora, “sin poner en riesgo el abastecimiento de graneles alimentarios y en condiciones de máxima seguridad”.
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