Recuerda que Renfe les entregó teléfono corporativo en 2001 y que “hubo su polémica” por si les llamaban “fuera del trabajo”
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 22 (EUROPA PRESS)
El jefe de Francisco Garzón, el maquinista acusado en el juicio por el accidente del Alvia, ha denunciado que “lo único que había” en la línea para la salvaguarda de la seguridad era que el conductor “se diera cuenta” de pasar a 80 kilómetros por hora por la curva de A Grandeira.
Juan Carlos Cons ha sido el tercer testigo en declarar este martes en el juicio por el siniestro ferroviario que acabó con la vida de 80 personas, y lo ha hecho a propuesta del abogado de Garzón, que también presentó a los dos anteriores (otro maquinista jefe y el formador de Garzón).
Su comparecencia ha comenzado en torno a las 15,00 horas y después de que los letrados de Garzón se ausentasen un par de minutos de la sala, ante lo que la jueza amenazó con darlo por renunciado.
La jueza se ha mostrado particularmente crítica esta jornada, pidiendo “agilidad” y lanzando reproches a algunas partes sobre que “esto no lleva a ninguna parte” y que ella “quisiera salir algún día de aquí”. “A usted por lo menos le pueden sustituir”, le ha llegado a soltar a un abogado que representa a víctimas del accidente.
CONOCIÓ EL AVISO “DE FORMA VERBAL”
A preguntas del letrado que defiende a Garzón, Cons, jefe de maquinistas de A Coruña, ha señalado que conoció el aviso sobre la peligrosidad de la curva “de forma verbal” y que estaba totalmente de acuerdo con sus advertencias y recomendaciones.
En concreto, el jefe de maquinistas José Ramón Iglesias Mazaira alertaba del brusco salto de velocidad en A Grandeira (de 200 a 80 kilómetros por hora) sin previo aviso, ya que era preciso iniciar el frenado antes de la señal de limitación, ubicada en el kilómetro 84.
En este sentido, ha subrayado que “lo único que había es que el maquinista se diera cuenta de que en el punto kilométrico 84 tenía que pasar a 80 kilómetros por hora”.
EL USO DEL TELÉFONO
Sobre el uso del teléfono, ha indicado que se les aportó uno corporativo en el año 2001 “y el convenio” les “obligaba” a los maquinistas a llevarlo “operativo” como “herramienta de trabajo”.
“Antes de dárnoslo hubo su polémica: ‘A ver si nos van a estar llamando todo el día o algo así, fuera del trabajo”, ha recordado que se comentaba.
A TRAVÉS DE CORREO ELECTRÓNICO
Por otra parte, el letrado ha interrogado a este testigo sobre qué debía hacer ante denuncias sobre la conducción, a lo que ha contestado que “un informe” para transmitir a su superior, el jefe de producción, mediante “email”.
Sobre si los jefes de maquinistas usaban el ‘PAI’, el sistema al que se está refiriendo la abogada del Estado que representa a Adif en las últimas jornadas, este profesional ha respondido que esos partes solo los usan los conductores para incidencias.
SOLO MEDIA HORA
Esta comparecencia ha sido significativamente más breve, con escasas cuestiones del resto de las partes personadas, de modo que tan solo se ha prolongado durante media hora.
Este miércoles está previsto que declare como testigo el presidente (en la actualidad secretario) del comité general de empresa de Renfe Operadora.
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