MADRID, 03 (SERVIMEDIA)
La toxicidad de la mayoría de las 350.000 sustancias sintéticas en circulación “no están debidamente evaluadas”, según revela el libro ‘Mentiras tóxicas. Cómo nos desprotegen las autoridades frente a los tóxicos que nos enferman’ del periodista y divulgador ambiental Carlos de Prada.
Asegura que la contaminación química es uno de los mayores problemas ambientales y sanitarios que afronta la humanidad. La obra recoge referencias y citas científicas, así como numerosas deficiencias de la toxicología oficial y las distintas maneras en las que las autoridades pueden estar desprotegiendo a los ciudadanos frente a las numerosas sustancias tóxicas que amenazan su salud.
El responsable de la iniciativa ‘Hogar sin tóxicos’, Premio Global 500 de la ONU y Premio Nacional de Medio Ambiente, De Prada, recalcó que la toxicología oficial actual necesita “una enmienda urgente”, a causa de los ”graves fallos” que afectan en la protección de la salud de los consumidores y al medio ambiente.
El principal objetivo del libro es trasladar a los consumidores las denuncias de la comunidad científica sobre la desinformación existente sobre las sustancias en circulación. Por ejemplo, la evidencia sobre sustancias que son consideradas seguras hasta una fecha y después son declaradas inseguras, cuando ya se han expuesto a ellas millones de personas durante años o incluso décadas.
De Prada menciona, entre otros, el caso del bisfenol A, después de que la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria haya propuesto rebajar su límite de seguridad 100.000 veces “nada menos” respecto al fijado en 2015, o 1.250.000 veces menos del establecido antes de ese año.
Por otro lado, afirma que el sistema actual con frecuencia “solo aporta una mera apariencia de seguridad”, de hecho, insiste en que informes de la Organización Mundial de la Salud señalan que estos métodos “muchas veces” no sirven para evaluar correctamente efectos importantes como los de la alteración hormonal, especialmente en los grupos más vulnerables, como embarazadas o niños, que son los más desprotegidos.
- Te recomendamos -