MADRID, 31 (SERVIMEDIA)
El vicesecretario de Institucional del Partido Popular, Esteban González Pons, aseguró este lunes que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, acordaron en la reunión que mantuvieron el pasado 10 de octubre y que sirvió para retomar las negociaciones para renovar el Poder Judicial que “no se tocaría el tema de las sediciones”.
El interlocutor del PP en las conversaciones para “renovar”, “reformar” y “regenerar” el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) también anunció que el pacto entre Gobierno y PP “estaba lejos de estar terminado” el jueves pasado cuando las conversaciones saltaron por los aires, porque dice que dependía de que el PSOE renunciase a “su posición histórica” y diese luz verde a que “los jueces elijan a los jueces”.
Tampoco ayudó la “inquietud” que había entre los ministros jueces –los titulares de Interior, Defensa y Justicia, Fernando Grande-Marlaska, Margarita Robles y Pilar Llop– por la regulación de las puertas giratorias. Según Pons, existió una “oposición” dentro del Gobierno a que el pacto avanzase en esta cuestión porque obligaba a estos ministros a volver a concursar a sus plazas para hacer efectivos sus reingresos a la carrera judicial.
En una entrevista de Onda Cero recogida por Servimedia, González Pons resumió así el contexto en el que se dio la decisión de Feijóo de suspender las conversaciones con el Gobierno para renovar el CGPJ y que, fundamentalmente, residió en una posible e hipotética reforma del Código Penal que redujese las penas del delito de sedición.
El vicesecretario de Institucional del PP afirmó que Sánchez y Feijóo hablaron de este asunto “desde el principio” de las negociaciones, así como de la posibilidad de que entrasen en el Tribunal Constitucional vocales “afines” a ERC.
“Y se pactó que no se tocaría el tema de la sedición y que en la última reunión, en un clima de buena sintonía, el presidente del Gobierno comunicaría al líder de la oposición quienes iban a ser los candidatos del Gobierno para el Tribunal Constitucional al efecto de que el líder de la oposición pudiera comprobar que no entraba ningún afín a Esquerra Republicana en el Alto Tribunal. Durante toda la negociación tuvimos claro, así se nos indicó, que no iba a haber magistrados afines a ERC y que tampoco se iba a tocar el delito de sedición”, declaró.
“Las cosas empezaron a complicarse a partir del lunes de la semana pasada” cuando los medios avanzaron de que “se acercaba” la reforma del delito de sedición. Según González Pons, su interlocutor y ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, le aseguró “por palabra” y “por escrito” que estas informaciones “no eran noticia” sino “periodismo de autor”, pero que después Sánchez confirmó “lo contrario” ante Feijóo.
CAMBIO SISTEMA DE ELECCIÓN
Más allá de esta cuestión, González Pons señaló que, aunque el Gobierno hubiese “ofrecido dos fechas” al PP para cristalizar el acuerdo, la negociación “no estaba cerrada” porque “quedaba el tema principal para que lo discutieran los presidentes”, que era la reforma del sistema de elección de los jueces y magistrados que conforman la cúpula del Poder Judicial.
Desde el primer momento, Génova solicitó al Ejecutivo que el CGPJ, una vez iniciase su nuevo mandato, propusiese en las Cortes un nuevo modelo para elegir a los siguientes vocales. Los populares exigían –y exigen– que el cambio del sistema propuesto fuera sí o sí en el sentido marcado por la Unión Europea, que supone dotar de más peso a los jueces en la elección. Los socialistas, en cambio, abogaron –y abogan– por no descartar ningún modelo, ni siquiera el ya vigente.
“Se han dicho muchas cosas que no o responden a la realidad. La negociación no está pactada. Quedaba el tema principal para que lo discutieran los presidentes uno con otro, que era qué fórmula se le ofrecía al Consejo General del Poder Judicial para que elaborara un nuevo modelo de Consejo General del Poder Judicial. Nosotros creíamos que la fórmula debía ser solo jueces eligen jueces. El Gobierno quería que la fórmula fuera jueces eligen jueces es una de las opciones”, expuso.
“Por otro lado, también quedaba que el presidente del Gobierno diese garantías de que no habría magistrados afines a Esquerra Republicana en el Tribunal Constitucional y el gran acuerdo, que no se iba a negociar ni la Presidencia del Consejo General ni del Tribunal Constitucional, sino que iban a ser los magistrados y los vocales los que eligiesen. Esas eran las tres grandes decisiones que quedaban por tomar por los presidentes. La primera (sistema de elección), sobre todo, podía echar abajo toda la negociación”, prosiguió.
PROPOSICIÓN DE LEY
González Pons se mostró durante toda la entrevista muy crítico con Bolaños, a quien reprochó que estaba dividido “como mínimo en tres partes”. Dijo que “no era libre porque mantenía a la vez una negociación” con el PP y otra con ERC.
Asimismo, negó que los 20 vocales del CGPJ se hubiesen acordado ya –como afirmó Bolaños el pasado viernes– y afirmó que “la mayor parte del tiempo” de las negociaciones se ha empleado en redactar una proposición de ley para reformar la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) para dotar a la Justicia de “mayor independencia”.
Por último, preguntado por si el PP prevé llevar esta reforma legislativa al Congreso, González Pons reconoció que esa una posibilidad, pero que la situación está “en un momento en el que las puertas están cerradas”, aunque “no con llave”.
“Nosotros no hemos suspendido la negociación. Si el Gobierno renuncia a pactar con Esquerra, con los independentistas, lo que afecta al Poder Judicial y vuelve a pactarlo con los constitucionalistas, nosotros estamos dispuestos a seguir adelante”, concluyó.
- Te recomendamos -
