SEVILLA, 25 (EUROPA PRESS)
Tras años dedicada al mundo musical, en el que es “sobradamente admirada” por el gran público, la artista Ana Reverte (1951) retoma su obra pictórica “con el interés creciente de explorar los adentros de mi emotividad, en una etapa diferente de mi vida, en la que siento la necesidad apremiante de reconocerme”.
Así surge ‘Alma’, una muestra promovida por el Ayuntamiento de su localidad natal, Los Corrales, que se abre este martes al público en la Casa de la Provincia de la Diputación de Sevilla, donde permanecerá hasta el 9 de noviembre, en la Sala Romero Murube, y en la que, según la restauradora y comisaria de Arte mexicana, Josefina López Sánchez, la artista pone a disposición “un conjunto de elementos abstraídos del contexto real, para serreinterpretados simbólicamente, mediante el acertado manejo de líneas, colores, luz y formas”, destaca la Diputación en una nota de prensa.
Para el fotógrafo y escritor, Antonio Zamora, “dos pasiones, la pintura y la música, hablan por sí mismas de la extraordinaria complejidad de Ana Reverte. Estas dos formas de ver y entender la vida, se dan cita en ‘Alma’ y complementan y enriquecen esta propuesta”.
Pero es la propia artista quien nos da las claves de la muestra: “en las formas que plasmo, encuentro sugerencias de paisajes quizá vistos en sueños; con atmósferas ya nebulosas, ya límpidas: espejos de agua que reflejan explosiones súbitas de colores vivos contra fondos negros o blancos; presencias simbólicas que parecen protagonizar silenciosas, la escena fuera de Tiempo y Espacio”.
“Encuentro tan sugestivos los umbrales, que traspaso ávida uno a uno, dejando la huella de nuevos caminos, a veces de sorprendente complejidad, y otras, algo más llanos”, ha afirmado la artista. “Pero siempre con la expectativa creciente de encontrar algo más allá, en una búsqueda interminable que promete y engancha. Búsqueda en sí misma. Libertadora y gratificante”, ha añadido Reverte.
La producción pictórica más reciente de Ana Reverte aporta una clave en la que cada uno de los elementos compositivos de las pinturas posee gran importancia para la concreción de la idea pictórica.
Para Josefina López Sánchez, el ejemplo son los fondos oscuros, que producen notables contrastes que llaman la atención hacia formas de brillantes colores; mientras que los claros permiten a la artista manejar la luz en forma gradual. “Con el predominio de las líneas ascendentes, nos encontramos unas veces con balizas que determinan el sentido de la composición y conducen al espectador hacia los puntos relevantes de la misma; mientras que otras, forman elementos vegetales que brotan del plano horizontal, mediante coloridas explosiones”.
“Resulta muy interesante notar la ausencia de límites en la composición de las obras: tal pareciera que existe un hilo conductor que las une, continuando la secuencia del texto pictórico de un cuadro a otro, sin que se produzca un cambio brusco entre ellos”, ha explicado Josefina López.
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