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Acaba la campaña de arroz con cifras “catastróficas”, aunque esperan que “tenga buen precio y compense”

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SEVILLA, 21 (EUROPA PRESS)

La campaña del arroz acaba de finalizar y, si bien, las previsiones ya eran pesimistas, las cifras reales han sido, en algunas zonas, “catastróficas”, con rendimientos que en la margen derecha han rondado los 4.000 kilos por hectárea, “menos de la mitad de lo que se suele cosechar”, y en el margen izquierda alrededor de los 8.000. Si bien, los agricultores esperan que el cereal “tenga buen precio y compense” la situación.

El presidente de la Federación de Arroceros de Sevilla, Mauricio Soler, ha insistido, en declaraciones a Europa Press, que finalmente se han confirmados los peores datos, teniendo en cuenta que solo se sembró un 30% de las 27.000 hectáreas disponibles, y, por tanto, “no ha sido un buen año” tanto por “las malas condiciones del río” –con una alta salinidad y con apenas caudal ecológico– como por las altas temperaturas del mes de julio.

No obstante, ha reconocido que la Confederación Hidrográfica el Guadalquivir (CHG) ha hecho “todo lo posible” para que los arroceros dispongan de “la mayor cantidad de agua” pero “no ha sido suficiente”. Al hilo de esto, ha destacado que los arroceros “devuelven cristalina el 75% del agua que captan con materiales en suspensión”, lo que les convierte en “un filtro del río”, además de ser “la despensa de Doñana” ayudando a su diversidad de flora y fauna.

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Ante esta situación, Soler espera que el arroz consiga “un buen precio” siempre temiendo que “la industria traiga barcos de fuera de España” e inundar el mercado aunque “sea de peor calidad y con menos controles”. “Que siempre miren de dónde viene”, ha instado a los consumidores.

Por último, ha reivindicado que el colectivo de los arroceros es de los regantes “más antiguos de la cuenca del Guadalquivir”, hay registros desde 1928 –apunto de cumplir los cien años–, pero, si bien, ha manifestado que “no nos sirve pagar un precio de oro por un agua de mala calidad, que llega, como este año, a 3,5 gramos de sal por litro”. De igual manera, ha señalado el respaldo “continuo” de la Consejería de Agricultura para ayudar al sector arrocero.


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