MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El balance de muertos a causa de la explosión de una bomba al paso de un autobús en los alrededores de la localidad maliense de Tilé, situada en el centro del país, ha ascendido a diez, según ha confirmado el Ejército de Malí.
El Estado Mayor del Ejército maliense ha señalado en un comunicado publicado en su cuenta en la red social Twitter que entre los muertos hay una niña de cinco años y ha agregado que otras 38 personas han sido trasladados a hospitales de Bandiagara y Sevaré.
“El vehículo, totalmente destruido por la potencia de la explosión, ha sido desplazado 30 metros desde el lugar de la detonación”, ha manifestado, antes de acusar del ataque al Frente de Liberación de Macina –perteneciente a la filial de Al Qaeda en el país, el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM)–.
Así, ha acusado al grupo, encabezado por el destacado yihadista Amadou Koufa, de “atacar deliberadamente objetivos civiles inocentes” y ha trasladado sus condolencias a los familiares de las víctimas.
“Estas actividades del Frente de Liberación de Macina, que juró lealtad al JNIM de Iyad ag Gali, demuestran la cobardía y la barbarie de esta organización terrorista que, ante su pérdida de poder y en desbandada, sólo ataca a civiles inocentes”, ha manifestado.
“Las Fuerzas Armadas siguen decididas en su lucha contra los terroristas responsables de la muerte de ciudadanos pacíficos”, ha señalado, antes de asegurar que “se adoptarán acciones inmediatamente para buscar y neutralizar a los terroristas y los cómplices de este acto innoble”.
La Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de las Naciones Unidas en Malí (MINUSMA) ha condenado “enérgicamente” el ataque ha ofrecido sus condolencias a las familias. Asimismo, ha expresado “su solidaridad con el Gobierno y el pueblo de Malí en este momento de luto” a través de un comunicado en su página web.
“La MINUSMA seguirá actuando con las autoridades malienses en apoyo a sus esfuerzos para lograr restaurar de forma duradera la seguridad a la que aspira profundamente el pueblo maliense”, ha resaltado. Por el momento ningún grupo ha reclamado la autoría del atentado.
Malí, al igual que otros países del Sahel, ha venido registrando en los últimos años un número creciente de ataques yihadistas obra tanto de la filial de Al Qaeda en la región como de la de Estado Islámico, lo cual ha hecho además aumentar la violencia intercomunitaria y provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas.
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