MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
Un equipo dirigido por investigadores de la Universidad de California en Riverside (EEUU) ha descubrierto que la exposición aguda de la piel al humo de tercera mano (THS) eleva los biomarcadores asociados con el inicio de enfermedades de la piel, como la dermatitis de contacto y la psoriasis.
El THS comprende los contaminantes residuales del humo del tabaco que permanecen en las superficies y en el polvo después de fumar el tabaco. Puede permanecer en superficies interiores indefinidamente, causando una exposición potencialmente dañina tanto para fumadores como para no fumadores.
“Descubrimos que la exposición de la piel humana al THS inicia mecanismos de enfermedades inflamatorias de la piel y eleva los biomarcadores urinarios de daño oxidativo, lo que podría conducir a otras enfermedades, como cáncer, enfermedades cardíacas y aterosclerosis. Alarmantemente, la exposición dérmica aguda al THS imita los efectos nocivos del tabaquismo”, señala Shane Sakamaki-Ching , ex estudiante de posgrado de UC Riverside que se graduó con un doctorado en biología celular, molecular y del desarrollo en marzo de 2022.
El estudio , publicado en ‘eBioMedicine’, es el primero que se realiza en humanos expuestos dérmicamente a THS. La investigación clínica, que se llevó a cabo en UC San Francisco, involucró la participación de 10 no fumadores sanos que tenían entre 22 y 45 años. Durante tres horas, cada participante usó ropa impregnada con THS y caminó o corrió en una cinta rodante durante al menos 15 minutos cada hora para inducir la transpiración y aumentar la absorción de THS a través de la piel.
Los participantes no sabían que la ropa tenía THS. Luego se recolectaron muestras de sangre y orina de los participantes a intervalos regulares para identificar cambios en las proteínas y marcadores de estrés oxidativo inducido por el THS. Los participantes de la exposición de control vestían ropa limpia.
“Descubrimos que la exposición aguda al THS provocó una elevación de los biomarcadores urinarios de daño oxidativo en el ADN, los lípidos y las proteínas, y estos biomarcadores permanecieron altos después de que cesó la exposición”, explica Sakamaki-Ching, ahora científico investigador en Kite Pharma en California, donde lidera un equipo de células madre.
“Los fumadores de cigarrillos muestran la misma elevación en estos biomarcadores. Nuestros hallazgos pueden ayudar a los médicos a diagnosticar pacientes expuestos a THS y ayudar a desarrollar políticas regulatorias que se ocupen de la remediación de ambientes interiores contaminados con THS”, añade.
Prue Talbot , profesora de biología celular en cuyo laboratorio trabajó Sakamaki-Ching, recuerda que la piel es el órgano más grande en contacto con THS y, por lo tanto, puede recibir la mayor exposición. “Existe una falta general de conocimiento sobre las respuestas de la salud humana a la exposición al THS”, señala Talbot, el autor correspondiente del artículo.
“Si compra un automóvil usado que anteriormente fue propiedad de un fumador, se está poniendo en riesgo para su salud. Si vas a un casino que permite fumar, estás exponiendo tu piel a THS. Lo mismo se aplica a permanecer en una habitación de hotel que anteriormente estaba ocupada por un fumador”, explica.
Las exposiciones a THS a las que fueron sometidos los 10 participantes fueron relativamente breves y no causaron cambios visibles en la piel. Sin embargo, los biomarcadores moleculares en la sangre que están asociados con la activación en etapa temprana de la dermatitis de contacto, la psoriasis y otras afecciones de la piel estaban elevados. Esto subraya la idea de que la exposición dérmica al THS podría conducir a la iniciación molecular de enfermedades de la piel inducidas por la inflamación.
A continuación, los investigadores planean evaluar los residuos que dejan los cigarrillos electrónicos que pueden entrar en contacto con la piel humana. También planean evaluar poblaciones más grandes expuestas a períodos más prolongados de THS dérmico.
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