MURCIA, 9 (EUROPA PRESS)
El Colegio de Psicólogos de la Región de Murcia ha querido trasladar, en el Día Mundial de la Salud Mental, su reflexiones y demandas sobre algunos datos que preocupan a los profesionales. Es el caso de que España sea el primer país de Europa en consumo de psicofármacos y la Región de Murcia lo multiplica por 50.
La investigación y las recomendaciones internacionales señalan a los tratamientos psicológicos como los más eficaces, efectivos y eficientes en el tratamiento de las problemáticas en materia de salud mental. “Es el momento de cambiar el modelo. Sabemos que no es fácil, pero sí muy necesario”, afirma María Fuster Martínez, decana del Colegio Oficial de Psicología de la Región de Murcia.
En este sentido, recuerda que hablar de salud mental es hablar de bienestar psicológico, pues la propia definición de salud mental de la OMS*afirma que se trata de un “estado de bienestar en el cual cada individuo desarrolla su potencial puede afrontar las tensiones de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera, y puede aportar algo a su comunidad”, definición inspirada en la definición de bienestar psicológico (C. Riff, 1995).*
La misma institución internacional hace importantes recomendaciones en materia de salud mental en lo referente a la formación de los agentes sociales de proximidad, para la prevención en materia de salud mental, entendiendo que para muchos países existe una carencia estructural en los sistemas de protección social y que los servicios más específicos y especializados están muy lejos de su alcance.
En la actualidad, España y, por ende, la Región de Murcia son tradicionalmente consideradas sociedades del bienestar de ese mundo de primera velocidad, pero cabría preguntarse dónde están nuestros servicios psicológicos específicos y especializados en materia de bienestar psicológico y salud mental.
Así las cosas, España, y en concreto la Región de Murcia, se encuentran a gran distancia de lo que es la media europea en psicólogos clínicos, de 18 a 6,2 en España, y en Murcia 5,8 psicólogos en sus centros de salud mental. Murcia es una de las comunidades autónomas que no ha solicitado la ampliación de plazas de formación para los psicólogos internos residentes (PIR).
“Si bien, esperanzados ante los anuncios de la inclusión de profesionales de psicología clínica en los centros de salud de atención primaria, esperando que sea a través de nuevas contrataciones de nuestros especialistas”, indica la decana.
En materia de Protección Social, alerta que también se está muy lejos de los planteamientos europeos. “Es inconcebible que, en una sociedad llamada del bienestar, poblaciones tan vulnerables como nuestros niños, niñas y adolescentes no dispongan de unos servicios psicológicos de acceso universal e inmediato en materia de riesgo en situaciones de maltrato infantil, garantizando su atención en los municipios donde viven, y que tengan así un acceso ágil y eficaz”, señala Fuster.*
Las derivaciones a programas para el tratamiento de cuadros clínicos marcados por el trauma lo conforman dispositivos específicos, largamente insuficientes para abordar esta grave problemática desde la promoción y prevención del maltrato infantil.
“Llevamos años reclamando que su abordaje se realice desde las competencias propias en los servicios sociales de atención primaria por parte de los profesionales de la Psicología, como una forma adecuada de garantizar la prevención y frenar la cronificación del daño en procesos de crecimiento complejos y siempre específicos en el tratamiento”, añade.
Y es que, los programas de prevención se estiman en una media de gasto por menor de 8.000 euros al año, y la institucionalización de un menor se cifra en 100.000 euros anuales.*”Nos congratulamos de que en el servicio de protección se hayan contratado dos nuevos psicólogos en el año 2022, según el anuncio de su dirección general”.
Para Fuster, orientar psicológicamente sobre las necesidades a proteger con las medidas a tomar en un caso de desprotección “debería considerarse una obligación. Es hora de garantizar los servicios psicológicos como un derecho fundamental de los niños, niñas y adolescentes en situaciones de violencia o maltrato. Tienen una magnífica oportunidad en la próxima Ley de Infancia de la Región de Murcia y una base legal en la LOPIVI”.
Por otra parte, el anuncio reciente de la Consejería competente sobre la futura inclusión de los psicólogos en la composición de los equipos profesionales en las residencias les hace tener esperanzas en los compromisos del Gobierno Regional.
Por último, el ámbito educativo esperan la pronta implantación en los centros del proyecto piloto de unidades de psicología, presentado por este colegio profesional. “Como queda demostrado en la investigación, por cada euro invertido en la inclusión de profesionales de la Psicología educativa en los centros se ahorran 20”, destaca la decana.
En este sentido, indica que el gobierno regional “tiene actitud de escucha y es el primer paso necesario, si bien requiere de un plazo, que obligadamente ha de ser breve dada la situación, para avanzar en los compromisos iniciales adquiridos”.
“Tanto gobierno como oposición han de ir más allá, comprometerse con la incorporación de la perspectiva psicológica en las políticas públicas, pues solo con planificaciones trasversales que incorporen los recursos profesionales psicológicos adecuados en número y lugar pertinentes, podremos disponer de una estructura suficientemente sólida y capaz para atender a lo que ya es un problema de salud pública”, subraya Fuster.
Por ello, hacen un llamamiento a esos poderes políticos y a las organizaciones de representatividad en la región para que incorporen la perspectiva psicológica en las políticas públicas.
Asimismo, ofrecen otras consideraciones. Hablar de salud mental es hablar de bienestar psicológico; y la invisibilidad de los registros de las actuaciones de los profesionales de la psicología, ha impedido el avance y el desarrollo de la perspectiva psicológica en las políticas públicas.
Igualmente, hablan de un “derecho fundamental velado”: “la ausencia de valoraciones psicológicas en situaciones de desprotección infantil y, subsiguiente carencia de garantía de atención psicológica más allá de los tratamientos especializados de salud mental. Trabajaremos, por ello, por la inclusión como un derecho fundamental a la prestación garantizada de la atención psicológica en los casos de desprotección y maltrato infantil”.
“Agradecemos al Gobierno Regional y a todas aquellas entidades e instituciones que hasta el momento han reflexionado con nosotros, su escucha, interés y compromiso inicial. Esperando que la ciudadanía de la Región de Murcia pueda pronto constatar el cambio en su día a día”, ha concluido la decana del Colegio de Psicólogos de la Región de Murcia.
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