MADRID, 28 (SERVIMEDIA)
El Sindicato de Enfermería (Satse) pidió este miércoles a las consejerías de Sanidad de las comunidades autónomas que agilicen el proceso administrativo para implementar “cuanto antes” las guías de prescripción enfermera que ya han sido aprobadas por el Ministerio de Sanidad.
Satse pidió por carta a los consejeros de Salud “que no se retrase” la aplicación de las guías ya aprobadas. En ellas, se establecen las condiciones para las que las enfermeras pueden participar en el uso, indicación y autorización de medicamentos sujetos a prescripción médica para personas con hipertensión, diabetes mellitus tipo 1 y 2, quemaduras y distintos tipos de heridas.
Subrayó que, tras la aprobación en julio por parte del Ministerio de Sanidad de tres nuevas guías de prescripción enfermera, “han de ser las consejerías de Sanidad autonómicas las que hagan realidad sin más retrasos su aplicación en sus respectivos servicios de salud”.
Por ello, el Sindicato de Enfermería recordó a los responsables sanitarios autonómicos que el Real Decreto de 2018 que regula las nuevas guías “establecía un periodo de dos años para su aplicación en el conjunto el Estado y ya han transcurrido cerca de cuatro años sin que aún estén aprobadas todas las guías necesarias”. Además, las ya aprobadas “siguen pendientes de implementarse en las diferentes comunidades autónomas”.
Por otra parte, Satse destacó que estas guías permitirán “maximizar la eficiencia y efectividad de la atención sanitaria y los tratamientos” o facilitar la accesibilidad para las actuaciones relacionadas con la medicación, evitando o reduciendo citas innecesarias o demoras. Además, ayudan a detectar e informar al paciente sobre efectos adversos relacionados con el tratamiento farmacológico para prevenir la aparición de complicaciones.
“Ha sido mucho el tiempo perdido y no podemos permitir que se siga dilatando la aplicación de una norma que conlleva, en definitiva, mayor eficiencia y eficacia en la atención sanitaria, menos burocracia y mayor agilidad, algo que debería ser siempre un objetivo prioritario para los responsables y gestores sanitarios de nuestro país”, concluyó el Sindicato de Enfermería.
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