MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El alcalde de Batres, Víctor Manuel López, ha tachado este jueves de “limosna ridícula” los 33.000 euros dados por el Gobierno de España por los daños del incendio forestal que arrasó hace algo más de un año el municipio, y que el Ayuntamiento calcula en 2 millones de euros de pérdidas.
El 24 de agosto de 2021, tras haberse producido en Batres el peor incendio en la Comunidad de Madrid en ese año, el Consejo de Ministros acordó la Declaración de Batres como Zona Gravemente Afectada por una Emergencia de Protección Civil.
Después de un año de esperas, y tras haber informado el alcalde tanto al Gobierno regional como al de España de daños superiores los 2 millones de euros, Batres ha recibido una subvención de 33.000 euros para reparar el campo de fútbol quemado, “ni un euro más para otros menesteres, y que obligó a aprobar una partida de 55.000 euros en junio y con cargo al remanente de tesorería y exigida por la Administración central para optar a esos 33.000”.
“Desde la política local, especialmente desde los pequeños municipios con riesgo de despoblación como Batres, no entendemos el abandono permanente de las potentadas administraciones públicas como la central y la autonómica. Aquí tuvimos que solventar una Filomena con recursos mínimos, un incendio y sus consecuencias solos, y una burocracia administrativa lenta y obsoleta sin apenas recursos humanos propios, por no aludir a la falaz actitud de las políticas del postureo de los representantes políticos de los Gobiernos de Madrid y de España”, critica el primer edil.
Además, recuerda que este año ha sido uno de los peores años en cuanto a incendios en España se refiere. Hace unos días el Gobierno de España volvió a declarar a decenas de municipios como zonas gravemente afectadas por una emergencia de protección civil.
“Muchos lo perdieron todo en esas catástrofes y se apegan a la fe de que el erario público les brindará recursos a fondo perdido. En Batres la fe se ha transformado en decepción e indignación. Los 33.000 euros para Batres son una limosna ridícula que pone de manifiesto los exiguos recursos que se ofrecen a los más humildes tras la tragedia vivida”, ha criticado.
También ha advertido “que se agarren los machos los pueblos que han ardido este verano” porque “el año que viene tendrán que seguir remando solos, por mucho reconocimiento que el Gobierno de España o los gobiernos autonómicos hagan de la desgracia”.
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