MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de Mauritania han liberado al expresidente Mohamed Uld Abdelaziz, detenido en junio de 2021 tras ser acusado de corrupción, tras lo que su equipo de abogados ha reiterado que el caso contra él y su encarcelamiento a la espera de juicio suponen medidas “al margen de la ley”.
Los abogados del exmandatario han criticado los “pretextos inventados” por la Fiscalía para “prolongar el periodo de detención ilegal”, si bien han recalcado que fue liberado el miércoles después de que todos estos argumentos “expiraran”, tal y como ha recogido el portal mauritano de noticias Atlas Info.
Así, han subrayado que la detención de Uld Abdelaziz supuso “una grave violación de la Constitución y los tratados y convenciones internacionales” y han adelantado que adoptarán medidas legales contra los implicados en “este crimen de detención forzosa”. Por su parte, la Fiscalía ha subrayado que seguirá trabajando “de forma decidida” en el caso y ha defendido sus acciones.
Según las informaciones de la revista ‘Jeune Afrique’, Uld Abdelaziz debería recibir de vuelta sus pasaportes para poder viajar, de cara a un posible desplazamiento a Francia para someterse a pruebas médicas después del cateterismo cardiaco al que fue sometido hace varios meses durante su detención en la capital mauritana, Nuakchot.
Si bien los abogados del expresidente reclamaron entonces su evacuación médica al extranjero, tres especialistas que seguían su caso en un centro médico de Nuakchot indicaron en su informe que podía continuar recibiendo tratamiento en el país africano.
Uld Abdelaziz pidió en diciembre de 2021 al actual mandatario y su antiguo ‘delfín’, Mohamed Uld Ghazuani, que deje de ser “testigo pasivo de una injusticia” y un “complot grotesco” ante el proceso por corrupción abierto contra él, tras denunciar en abril la existencia de una campaña de “intoxicación” contra su persona.
El exmandatario fue imputado en marzo de 2021 por corrupción junto a otras diez personas, entre ellas dos ex primeros ministros y varios exministros, en el marco de una investigación por delitos presuntamente cometidos durante su periodo como presidente del país africano.
Uld Abdelaziz, quien accedió a la Presidencia mauritana tras ganar las elecciones en 2009 –un año después de encabezar un golpe de Estado y presidir el Alto Consejo de Estado durante un periodo de transición–, abandonó el cargo en 2019, tras la victoria de Uld Ghazuani en las elecciones, a las que concurrió con su apoyo.
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