Su plantilla ha crecido más de un cien por cien y ha gestionado 240 adopciones de perros y gatos y mantiene la eutanasia cero
VALLADOLID, 5 (EUROPA PRESS)
El Centro de Protección Animal de Valladolid ha ampliado y mejorado sus instalaciones con una inversión que ha superado los 100.000 euros y ha incrementado su personal de forma “notable”, en más de un cien por cien.
Así lo ha destacado el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, durante su visita a estas dependencias municipales acompañado por el concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, Alberto Palomino.
Puente ha asegurado que la visita ha tenido como objetivo también dar a conocer unas dependencias municipales que quizá no se conocen tanto por la ciudadanía y en las que se ha desarrollando un trabajo que también pone de manifiesto el compromiso del Equipo de Gobierno con la protección y el bienestar animal.
“Algo en lo que creemos firmemente, siendo conscientes, como somos, de una sensibilidad creciente de la población en torno al bienestar animal”, ha señalado.
Así, ha explicado que la mejora del centro pasaba fundamentalmente por un incremento en el personal, que se ha producido “notablemente”, y por otro lado por unas inversiones en el espacio para intentar que sea cada vez mejor y adaptado para las necesidades que tiene la ciudad en esta materia, para lo que se ha hecho una “importante” inversión en los últimos años.
En cuanto al personal, el Ayuntamiento ha dado prioridad al Centro Canino, incrementando en los tres últimos años la plantilla más de un cien por cien al pasar pasado de un veterinario a tres; de cinco oficiales de zoonosis a doce, un nuevo auxiliar de clínica veterinaria y un auxiliar administrativo.
La atención de los profesionales garantiza el proceso de adopción y todos los tratamientos, concretamente 115 adopciones de perros y 125 gatos durante el pasado año. Asimismo, se realizaron más de 400 esterilizaciones.
Además, se ha ampliado el horario del CMPA, con horario de mañana y tarde y sábado por la mañana, para que los animales reciban los cuidados necesarios para garantizar su bienestar, tanto en comida, limpieza y refugio.
En cuanto a las instalaciones, se ha realizado una obra de ampliación y reforma del centro, con nuevos cheniles (habitáculos para los animales), zona de lazareto, zona de seis cheniles para cuidados postclínicos, remodelación de la zona de clínica con un espacio destinado a quirófano para esterilizaciones y pequeñas intervenciones y curas, dotado de todos los materiales e instrumental necesario. En dicha obra se han invertido 100.000 euros más IVA.
INTERVENCIONES
Entre las actuaciones figura una entrada de servicio desde la calle Padre Bernardo Hoyos al almacén de productos zoosanitarios, para mayor facilidad para los trabajadores en el manejo de productos tóxicos con salida directa al exterior, con lo cual se evita el paso por el interior de las instalaciones. Se ha habilitado la apertura posterior de las perreras para permitir la estancia del animal fuera. También se facilitan las labores de limpieza al tiempo que se previenen posibles accidentes de los trabajadores con los animales.
Para la ejecución de los nuevos accesos a los cheniles, se ha demolido parte del cerramiento exterior permitiendo la apertura de los huecos, y se ha dotado de nuevas carpinterías de acceso.
Asimismo, se ha reformado la marquesina del aparcamiento junto al edificio principal para seis vehículos en el interior de la parcela, en un pabellón para acogida de voluntarios, escolares y actividades de información.
Es un pabellón de forma rectangular con dos de sus lados opacos y los otros dos lados abiertos, acristalados hacia la zona de paseo de los perros, con la idea que en este espacio puedan interactuar los escolares y voluntarios con los animales. El aula, espacio principal, tiene una superficie de 58 metros cuadrados.
Así, el primer edil considera que las mejoras permiten atender “mucho mejor” a los animales que entran en las mismas, se están facilitando más las adopciones de animales a la ciudadanía vallisoletana, que “responde de una manera muy, muy positiva”.
En concreto, las mejoras han supuesto una dotación muy completa en aparataje, material e instrumental para la clínica veterinaria; la instalación de palets en todos los cheniles para aislamiento del suelo; que en algunos habitáculos se hayan instalado focos de infrarrojos; que haya un área más de esparcimiento canino; y un incremento de la partida de medicamentos y los medios de tratamiento.
También existe un servicio de aseo de los animales; y se lleva a cabo vacunación, desparasitación, identificación y esterilización de los animales que se entregan en adopción.
Además, existe el Plan de Salud Felina Municipal, con la implantación del sistema CER (Captura, Esterilización y Retorno) de gestión de colonias felinas, en colaboración de las Asociaciones de Protección Animal y los voluntarios alimentadores y se aprobó el protocolo de participación de colaboradores con el Centro Municipal.
Puente cree que es una labor que al final redunda en “calidad de vida” y considera que también “la sociedad, su grado de evolución, en muchas ocasiones se mide por el trato que le dan a los animales” y las más avanzadas son “las que garantizan una mayor dignidad a los animales, en la medida en que también” en la medida en que las necesidades de las personas “están más cubiertas y el grado de civismo y educación es mayor”.
OCUPACIÓN, EUTANASIA CERO
Virginia Diéguez, veterinaria, ahora tienen unos 40 o 50 perros y en torno a 20 gatos, pero este verano llegado a estar con unos 50 gatos debido a todas las camadas que se producen en al final de primavera y verano y de perros se han tenido algunos más también, pero seguido con las adopciones y sobre todo después, que se han reactivado y en las últimas semanas han salido diez o 15 perros, también porque han tenido alguna camada y los cachorros salen más fácilmente.
Diéguez ha recordado que la ordenanza municipal contempla la “eutanasia cero” y, en ningún caso, salvo por un motivo de una agresividad extrema o por un motivo de salud, que el animal esté sufriendo, no se sacrifica.
“Y eso sí que es un mensaje que tenemos que difundir más porque todavía sigue viniendo gente aquí, cuando dejan por circunstancias el perro, vienen adoptar a uno y se piensan que esto todavía sigue ocurriendo. Tienen esa concepción”, ha asegurado.
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