MADRID, 29 (SERVIMEDIA)
Consumir té negro puede estar asociado con un riesgo de mortalidad moderadamente menor, especialmente entre quienes beben dos o más tazas al día.
Así lo sugieren investigadores de Institutos Nacionales de Salud, de Estados Unidos, en un estudio publicado este lunes en ‘Annals of Internal Medicine’.
El té es una de las bebidas más consumidas en el mundo. Investigaciones anteriores han sugerido una asociación entre su consumo y un menor riesgo de mortalidad en poblaciones donde el verde es el tipo de té más común. Por el contrario, los estudios publicados en poblaciones donde el consumo de té negro es más común se limitan a resultados inconsistentes.
Investigadores de los Institutos Nacionales de Salud realizaron un estudio para evaluar las asociaciones del consumo de té con la mortalidad por todas las causas y por motivos específicos utilizando datos del Biobanco del Reino Unido, donde el consumo de té negro es común.
También evaluaron si las asociaciones difieren según el uso de aditivos comunes para el té (leche y azúcar), la temperatura del té y las variantes genéticas que afectan la velocidad a la que las personas metabolizan la cafeína.
El Biobanco del Reino Unido incluye datos sobre medio millón de hombres y mujeres de 40 a 69 años de edad, que completaron un cuestionario de referencia entre 2006 y 2010.
De ellos, el 85% informó beber té con regularidad, de los cuales el 89 % notificó consumir té negro. En relación con los no bebedores de té, los participantes que informaron haber tomado dos o más tazas al día tenían entre un 9% y un 13% menos de riesgo de mortalidad.
Esta conclusión es independientemente de si los participantes también bebían café, agregaban leche o azúcar a su té, su temperatura preferida del té o variantes genéticas relacionadas con el metabolismo de la cafeína.
Según los autores, sus hallazgos sugieren que el té, incluso en niveles más altos de consumo, puede ser parte de una dieta saludable.
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