ALMERÍA, 5 (EUROPA PRESS)
El consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía, Ramón Fernández-Pacheco, ha visitado este viernes las obras encaminadas a la recuperación del humedal de las Salinas de Cabo de Gata, en Almería, donde se espera que el agua del mar vuelva a estar presente sobre el mes de octubre, según los plazos ofrecidos al Gobierno andaluz por parte de la empresa Unión Salinera, empresa que explota comercialmente este espacio.
En declaraciones a los periodistas, el consejero ha detallado que la empresa contempla un plazo de dos meses para efectuar los trabajos de desobstrucción del canal que alimenta de agua marina el humedal protegido, cuyas charcas sufren un proceso de desecación total desde hace más de dos meses, lo que ha dado lugar a la ausencia de avifauna.
“Se trata de una actuación complicada, van a tener que venir mineros de otros puntos de España como de León o de Asturias para poder realizar estos trabajos especializados”, ha detallado el titular andaluz de Sostenibilidad, quien ha afirmado que las condiciones meteorológicas también podrían influir en las previsiones iniciales.
No obstante, Fernández-Pacheco ha asegurado que el objetivo es que “antes de que llegue el otoño esté todo perfectamente restaurado”, por lo que confía en que los trabajos autorizados desde la Junta de Andalucía concluyan en tiempo y forma, lo que contribuirá también a la recuperación de las especies desplazadas.
El consejero ha apuntado que si bien se trata de un humedal que “se nutre de manera artificial a través de una bomba de impulsión y de un canal que lo conecta con el mar”, el lugar constituye un “sitio maravilloso” que es “hogar de muchas especies de un gran valor ecológico” por lo que el “empeño” de su departamento es que las Salinas “se restauren lo antes posible” y que se pueda “recuperar toda esa fauna que habitualmente vive en este entorno”.
El responsable andaluz de Sostenibilidad ha recordado que el proceso de desecación del humedal, enclavado en zona de especial protección A1 del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, se inició “la pasada primavera” a raíz de unas “fuertes lluvias torrenciales” que provocaron la acumulación de sedimentos en el canal que nutre de agua marina las Salinas.
Ese “tapón” es el que ha impedido durante semanas que el habitual aporte de agua marina pudiera seguir realizándose en la zona, donde el calor posteriormente ha acelerado la desecación del espacio y ha obligado a las aves a “irse a otro espacio cerca”.
Los trabajos iniciados el pasado lunes tras agilizar los permisos ambientales necesarios marchan “según lo previsto”, según Fernández-Pacheco, quien espera que el próximo otoño este espacio natural “tan importante para la imagen del Parque Natural de Cabo de Gata y para la imagen de la provincia de Almería” quede restablecido y vuelva a ser el espacio biológico “hogar habitual de tantísimas aves” como lo ha sido hasta ahora.
Con ello, ha agradecido el trabajo efectuado desde la Delegación Territorial de Desarrollo Sostenible, la dirección del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar y de la Unión Salinera a la hora de poner en marcha “con la mayor celeridad” las obras para la recuperación del espacio.
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